La violencia en el fútbol juvenil sigue campando por sus anchas. El último episodio se ha producido en Mallorca. En concreto, en el partido disputado en el campo de Servense, que recibía al Madre Alberta. En un momento dado, un futbolista local le propina al ... rival una violento patadón en la cara sin que hubiera ningún balón de por medio. Todo ello ante la apática mirada del resto de jugadores. Como si fuerse la cosa más normal del mundo.
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Y eso que el chaval se desplomó nada más recibir el patadón. El caso es que los problemas entre los dos futbolistas venían de un enfrentamiento anterior cuando un jugador del Severense se reincorporaba al campo tras sufrir una falta. En ese momento, le da un empujón a un rival que le propina una patada en la pierna como respuesta. Y sin balón de por medio.
Al no pitar el árbitro nada, el agredido decide ejecutar su particular 'vendetta'. Y es entonces cuando le lanza una patada en la cara. En esta ocasión, el colegiado sí decide actuar: tarjeta roja y expulsión. Mientras tanto, los servicios sanitarios trataban de atender al chaval que seguia desplomado sobre el césped rodeado por sus compañeros. Finalmente, el partido terminó con victoria de los visitantes por 2-3, aunque en esta ocasión el resutado es lo de menos. El juego limpio volvió a perder.
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