Inglaterra, el equilibrado Southgate, a confundir a los insatisfechos

Gareth Southgate, seleccionador de Inglaterra desde 2016, cree que su lista de 26 para el Mundial tiene el equilibrio que él persigue como esencial cimiento. Es ya el entrenador de la escuadra nacional que más partidos acumula en su palmarés, 76, desde los 113 de Alf Ramsey, que ganó la Copa del Mundo en Wembley en 1966. Tiene contrato hasta 2024, pero ha tenido que aclarar que dimitirá cuando sienta que no es querido.

Gary Lineker, que formó parte de la selección que perdió la semifinal de la Copa del Mundo de 1990 contra Alemania, en los penaltis, es ahora comentarista en la televisión BBC y ha criticado a Southgate por ser «excesivamente cauto». Pero su porcentaje de victorias, 60,5, sólo es superado por Ramsey, 61,1, dos que no ganaron nada – Glen Hoddle, 60,7, y Fabio Capello, 66.7– y Sam Allardyce, que duró un partido y lo ganó, pero fue despedido por acusaciones de corrupción.

En la presentación de su escuadra, Souhgate subrayó también la importancia de tener 26 futbolistas y cinco sustituciones. «Tienes diferentes opciones para diferentes momentos de los partidos y fases del torneo», explicó. Sin embargo, ha sido a menudo criticado de no ser un entrenador que reacciona a la dinámica de los partidos con prontitud o acierto.

Llevó a Inglaterra a la semifinal de la Copa del Mundo de 2018 en Rusia, perdiendo contra Croacia en la prórroga, y confirmó a su selección como un equipo competitivo en torneos internacionales alcanzando la final del Euro 2020, en Wembley, que perdió contra Italia en los penaltis. Pero no ha ganado ningún partido desde hace un año, cuando batió 0-10 a San Marino para obtener el pasaporte a Qatar. La Liga de Naciones fue una hoja en blanco.

Para otro goleador legendario, Alan Shearer, esta escuadra es frágil en la defensa. El lateral derecho del Chelsea, Reece James, no puede ir por una lesión y el del City, Kyle Walker, no ha jugado un partido desde que tuvo que someterse a cirugía en un abductor al principio de octubre. Harry Maguire ha perdido su plaza en el centro de la defensa del United.

Como hace con Walker, Southgate se arriesga con Kalvin Phillips, que jugó el miércoles con el City sus primeros cuarenta minutos tras una lesión de hombro en septiembre. El seleccionador cree que no hay jugadores de su tipo para formar pareja con Declan Rice, o sustitutirlo, en el centrocampo defensivo. Conor Gallagher, novato del Chelsea, es la sorpresa en la lista de opciones en el motor del equipo.

El mejor delantero, Harry Kane, padece fatiga. Y Raheem Sterling se ha perdido en el constante cambio de posiciones en el Chelsea. Pero a los Phoden, Ashford, Grealish y Saka, Southgate ha añadido un goleador con dos buenas piernas para el disparo, Callum Wilson, del Newcastle, y a un medio punta estelar en el Leicester, James Maddison.

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