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IÑAKI IZQUIERDO
Martes, 26 de marzo 2019, 09:38
Lorenzo Juarros se lleva al Getafe una agenda de gran profundidad, construida en una década de trabajo y contactos al servicio de la Real. Y también, un olfato especial en la siempre delicada tarea de seleccionar entrenadores. Con el club en situación dramática, Loren puso ... encima de la mesa el nombre de Martín Lasarte, que era un desconocido y se convirtió en la primera piedra del resurgir de la Real, con su estilo fogoso. Supo ver como nadie que la llama del uruguayo no bastaría para progresar en Primera y decidió sustituirle por un entrenador que también volaba por debajo del radar: Philippe Montanier.
El entonces (y hoy, de nuevo) director deportivo del Sevilla, el famoso Monchi, siempre habló con admiración de este fichaje. Uno como él, que pasa por ser un conocedor máximo del fútbol francés, no le había detectado. Loren sí, le dio la Real y el normando la condujo a Europa. La grada se llevó por delante al francés y a Loren no le entusiasmó la idea, pero tenía sustituto: el Tata Martino. El argentino no pudo liberarse a tiempo de Newell's para la previa de la Champions que debía jugar la Real, y ascendió Jagoba Arrasate. Más tarde, Martino fichó por el Barcelona. Con Arrasate la Real volvió a Europa.
Nadie se ha esforzado nunca en desmentir que Loren no tuvo nada que ver en el fichaje de David Moyes. Sí eligió a Eusebio, a quien la Real dio la alternativa en Primera. También condujo a la Real a Europa, pero su destino acabó emparejado con el de Loren, fuera de la Real. Su relevo es Roberto Olabe.
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