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Fernando Romero
Amorebieta
Viernes, 4 de marzo 2022, 19:31
Es de sobra conocido que Iñigo Vélez de Mendizabal tiene grabado a fuego en su libreto de entrenador ese 'mantra' que reza que no hay que mirar más allá del encuentro que les toca afrontar cada fin de semana. Que deben preparar cada partido como si fuera el último. Focalizarse en ese objetivo sin distraerse con echar cuentas ni mirar la clasificación ni nada por el estilo. Pues bien, el de este domingo ante el Málaga es un envite que el Amorebieta debe preparar y afrontar de esa manera. Un duelo prácticamente a cara o cruz que puede mantenerle vivo o dejarle descolgado casi de forma definitiva en la lucha por la permanencia.
El vitoriano lo sabe, pero ha evitado cargar de presión extra a sus jugadores, que también son conscientes de sobra de que están en el momento más delicado de la temporada. El titular del banquillo de Urritxe sí que ha admitido que, de cara al domingo, «nuestro planteamiento claro que tiene que ser como el de una final o un último partido», pero sin ir mucho más allá ni salirse en exceso del guion previo a cada encuentro.
Vélez de Mendizabal prefiere poner el foco en el trabajo propio, en la obligación que tienen de hacer de su necesidad una virtud para sacar adelante este vital encuentro ante el conjunto andaluz. «Está en nuestra mano», ha repetido en varias ocasiones en la sala de prensa de Urritxe. Los dos últimos traspiés han dejado al Amorebieta en una incómoda situación. Ha perdido su 'situación de privilegio' que le colocaba como el principal candidato en esa lucha por intentar salir de la zona roja. Y para tratar de recuperarla, solo le vale sumar los tres puntos.
«Necesitamos ganar, pero pera eso tenemos que hacer las cosas bien, hacer un partido prácticamente redondo», asevera un Vélez de Mendizabal «convencido» de que pueden hacerlo. Es más, de que van a conseguirlo. En el vestuario, «la gente está convencida», «listos para darlo todo el domingo», destaca. «Sé la situación, sé que queremos ganar. Vamos con esa idea y estoy convencido de que lo vamos a conseguir», insiste en este mismo sentido, un mensaje también repetido en varias ocasiones.
«Sabemos dónde estamos y lo que supone ganar para nosotros. Somos conscientes de que queremos ganar, de que nos vendría muy bien, pero está en nuestras manos. Cada semana tenemos un reto, y en este caso está en nuestras manos hacer un gran partido», comenta el preparador de los de Urritxe. El partido del domingo «lo vemos como una final pero porque nosotros somos conscientes de que nos cuesta mucho ganar, nos cuesta mucho sacar puntos», apostilla.
La moral de la tropa zornotzarra está recuperada después del varapalo de Valladolid. Lo que toca ahora es saber gestionar la presión, el ansia de querer hacer las cosas bien ante un rival directísimo pero también repleto de urgencias. Eso será importante sobre el verde de Lezama el domingo. «A estas alturas todo el mundo tiene necesidades, si no es por una cosa es por la otra. Nosotros esa necesidad la tenemos desde la jornada uno, y cada vez quedan menos jornadas. Pero yo creo que el equipo en ese aspecto está tranquilo», relata el míster de los azules.
Pero si hay un mensaje que a lo largo de su comparecencia ha dejado meridianamente claro Iñigo Vélez es que «lo que tenemos que hacer es no cometer errores, no dar tantas facilidades como hemos dado en los dos últimos partidos». Unos errores puntuales que, como en el resto del curso, les han castigado en exceso. Por eso, el principal objetivo del vitoriano en este partido es «volver a sentirnos cómodos». Así estarán un paso más cerca de volver a la senda de la victoria. «Si nos tienen que ganar, que sea porque han sido mejores, no por desconcentraciones nuestras. Esa es la idea, la de hacer un buen partido. Vamos a salir a ganar seguro, y vamos a ganar. Pero hay que hacer las cosas muy bien para eso», lanza.
«Tenemos que hacer un partido muy bueno ofensiva y defensivamente, y de esa manera vamos a estar cerca de ganar. Somos nosotros los que tenemos que dar un paso adelante y estar concentrados los 90 minutos», reclama Vélez que, por si acaso, recuerda que «el fútbol no es ciencia y por hacer un gran partido no vamos a ganar. Pero por lo menos debemos sentirnos con esa sensación de darlo todo, y de esa manera estaremos más cerca de ganar».
«Nuestro planteamiento claro que tiene que ser como el de una final o un último partido. Tenemos que ser conscientes de que no podemos regalar nada, de que tenemos que hacer las cosas muy bien, y aún así nadie te asegura la victoria. Pero por lo menos saber que lo hemos dado todo, que hemos hecho todo lo que hemos trabajado y salir convencidos de que va a salir bien», arenga.
A quien cree que no necesita animar para que acudan el domingo a Lezama es a la afición zornotzarra. Más bien devolverles el apoyo que les prestan en cada partido. «Ellos animan al máximo. Lo que quiero es seguir animándoles haciendo nosotros las cosas bien. Ojalá que podamos devolverles lo que nos animan cada domingo. Nosotros nos vamos a dejar la vida por ello», lanza.
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