Javier Martón, de deseado a principal peligro para el Amorebieta en Anduva

Era la cuarta diana del curso para Javier Martón, un registro más que aceptable teniendo en cuenta que se ha perdido casi media temporada. A mediados de enero, fue operado de una rotura del peroné distal de la pierna izquierda que en un principio hizo pensar en que podría perderse lo que restaba de competición. Unos plazos acortados que le han permitido regresar en el momento crucial de la temporada. El pasado 18 de abril se reincorporaba a la disciplina rojilla. Contra el Racing pisó el verde de forma testimonial. Ante el Elche tuvo algo más de veinte minutos. Y el pasado fin de semana tuvo ya de nuevo galones partiendo de inicio.

Más allá de sus destacables números, lo importante de Javier Martón es todo lo que aporta el delantero al juego de los de Alessio Licci. Un futbolista con planta, que aguanta bien la pelota y que se desenvuelve con comodidad en todo el frente de ataque. Unas cualidades que le sirvieron para ser incorporado a Lezama desde Zubieta y que, visto su rendimiento, le convierten en un más que serio candidato a quedarse bajo la batuta de Ernesto Valverde.

El domingo, en la final de Anduva entre Mirandés y Amorebieta, hay pocas dudas de que Martón volverá a partir de inicio para tratar de decantar la balanza del lado del conjunto jabato, al que le basta el empate en ese partido para salvar la categoría y mandar a los de Urritxe de regreso a Primera Federación.

Los azules conocen más que de sobra al delantero navarro. De hecho, fue una de sus prioridades a la hora de armar el proyecto en esta su segunda aventura en el fútbol profesional. Tocaron la puerta de Lezama en reiteradas ocasiones solicitando su cesión, pero siempre se toparon con la misma respuesta. Martón no se iba a mover del Athletic, o por lo menos no iba a hacerlo hasta el mercado de invierno. Esa cerrazón obligó a los de Urritxe a buscar alternativas para su ataque.

Su sorpresa -y enfado- llegó cuando casi sobre la bocina se anunció que el jugador salía rumbo a Miranda. Ese movimiento, unido a las muchas trabas que se encontraron para poder hacerse con los servicios de Jon Morcillo, no sentó nada bien en la entidad zornotzarra, ni entre su afición Ese malestar lo muy claro el director deportivo Asier Goiria en su comparecencia para valorar el mercado de fichajes. Desde un tono pausado, recalcó que «siendo un club convenido y vizcaíno, me hubiese gustado que esa colaboración hubiese sido mucho más a fondo». «Hemos pedido a Javi Martón porque a nosotros nos parecía un jugador interesante, incluso para el crecimiento del chaval este proyecto le podría venir bien. Todo el mundo pensaba que Javier se iba a quedar y no ha sido así. Sus motivos tendrán», comentaba Goiria. «Es otro año más que se podían haber hecho muchas cosas entre dos clubes vizcaínos que son los clubes convenidos», lamentaba entonces. El domingo, confían los azules, que el futbolista rojiblanco no esté acertado.