El Amorebieta vuelve al trabajo centrado en la Copa

El feudo zornotzarra, engalanado y reluciente tras una mano de pintura en algunas zonas, se prepara para acoger este domingo otro duelo de esos que quedará para el recuerdo: la eliminatoria de Copa del Rey ante el Celta de Vigo. Un choque para el que ya no quedan entradas y que obligará al club a un esfuerzo logístico importante por el hecho de recibir a un rival de la máxima categoría. Por ejemplo, para ubicar las hasta once cámaras que instalará el operador televisivo.

A nivel deportivo, la plantilla azul ha regresado con las pilas cargadas y la mente despejada para afrontar una exigente segunda mitad del calendario, y quieren dar un primer paso logrando un triunfo motivador ante los de Rafa Benítez, a quienes esta cita con el torneo del KO les viene incluso peor que a los vizcaínos

Porque de eso se trata. De hacer borrón y cuenta nueva con la llegada del nuevo año y que el propósito de enmienda empiece a cumplirse cuanto antes. La semana de trabajo servirá para que Jandro y los suyos se esmeren en tratar de recuperar el rumbo perdido en un curso que arrancó con buena cara pero que se fue torciendo con el paso de las semanas.

Empujados por su afición, que abarrotará Urritxe contra los celestes, los zornotzarras quieren comenzar el año con un punto de inflexión definitivo, coger fuerzas para tratar de alcanzar un objetivo que ahora mismo se ve lejano. Por eso la mirada se centra en el plano corto, en lo más inmediato. El famoso partido a partido.

Aunque resulte inevitable levantar la vista para mirar más allá en un mes de enero que puede y debe marcar el camino del Amorebieta. Para bien o para mal. En el horizonte asoman el choque en el Carlos Tartiere contra el Oviedo del sábado 13, la vuelta a Lezama siete días después para recibir a un viejo conocido como el Eldense, y el que se antoja trascendental duelo más que directo contra el Cartagena en Cartagonova, aún con horario por designar. Sin obviar que si los de Jandro hacen la machada de eliminar al Celta, se colarían en unos octavos de final de Copa que se disputarán a mediados de enero.

Un mes en el que también se esperan movimientos en ambos sentidos en la plantilla del Amorebieta para reforzar aquellas parcelas en las que están mostrando mayores carencias. Y eso apunta directamente a la zona ofensiva. No obstante, la delicada situación de las arcas del club de Urritxe invita a pensar en que no habrá demasiadas llegadas. Para producirse, además, están obligados a abrir la puerta de salida. Por eso, la Copa, aunque a nivel deportivo pueda llegar a estorbar en algún momento, sería un pequeño gran salvavidas en lo económico.