El Amorebieta, obligado a recuperarse en Lezama

Los resultados en forma de victoria no terminan de llegar para los de Jandro, que aún no ha podido guiar a los suyos hacia el triunfo en las cinco jornadas que lleva al mando del Amorebieta. Dos empates y tres derrotas en su balance, con el equipo dando una de cal y una de arena.

Las sensaciones que transmite el equipo son una montaña rusa. Lo mismo es capaz de reponerse y encerrar en su campo al Oviedo en el Carlos Tartiere que desaparece en Lezama contra el Alcorcón o el Eldense, ante el que acabó sin generar una ocasión clara de gol. El sábado contra el Cartagena, la propuesta de los zornotzarras fue valiente, funcionó durante 75 minutos. Sin embargo, faltó una vez más claridad en los últimos metros y concretar las ocasiones. Troncho y Dorrio tuvieron la victoria en sus botas, pero Lizoain y el palo se lo negaron.

Después, pasó lo que suele pasarle a los equipos en horas bajas, a los que no les sale nada y cuya dinámica es una espiral para la que no encuentran salida. El VAR, en otra decisión polémica contra el Amorebieta, decretó un penalti que Andy no perdonó.

Las dos próximas jornadas el Amorebieta las juega en su prestada casa de Lezama. En su feudo, debería tratar de darle la vuelta a la tortilla, recuperando la fortaleza perdida hace ya demasiadas jornadas. Racing de Santander y Elche serán las dos próximas y exigentes pruebas de toque para un Amorebieta al que solo le vale ganar para tratar de engancharse de nuevo a la lucha por salir del pozo.

El Amorebieta apura los últimos días de este mercado de fichajes para tratar de reforzarse, especialmente en la parcela ofensiva. Unos movimientos frenados por el escaso margen económico que tienen los de Urritxe y por la dificultad para poder concretar alguna salida, como la de Daniel Lasure. La dirección deportiva está a la espera de poder resolver esa situación para terminar de cerrar alguno de los nombres que tiene en cartera.

El que ya se ha despedido del vestuario azul es Luis Quintero, cuyo fichaje por el Deportivo de La Coruña será oficial de forma inminente. El colombiano ya no volvió con sus compañeros tras la derrota de Cartagena, sino que se dirigió a tierras alicantinas. Amorebieta y Villarreal ya han cerrado el acuerdo para deshacer la cesión, y solo queda que gallegos y castellonenses terminen de pulir los últimos detalles del acuerdo.