Alex Carbonell confía en que «en cualquier momento esto puede cambiar»

El Amorebieta lucha por tratar de darle la vuelta a una situación tremendamente complicada en una segunda vuelta que, de momento, no ha empezado con buen pie. Los resultados siguen sin acompañar a un equipo que da una de cal y una de arena pero al que le falta terminar de encontrar el punto de inflexión en forma de victoria que le insufle nuevos ánimos a un vestuario necesitado de alegrías.

En el seno de la caseta, pese a todo, se mantiene el punto necesario de ilusión y optimismo para no dejarse llevar. Todavía queda mucha liga por delante y las matemáticas aún le conceden opciones de permanencia al Amorebieta. Por pocas que sean, los de Urritxe «vamos a estar hasta el final peleando», tal y como asegura Alex Carbonell.

El centrocampista de Cerdanyola del Vallés, uno de los motores del equipo en la creación de juego, es muy claro en este sentido. «Puedo asegurar que nosotros nos vamos a dejar todo, porque dejarnos llevar o tirar la toalla no está dentro de nuestra filosofía, de nuestra manera de entender lo que es un equipo profesional», lanza.

Carbonell ve al equipo «convencido, fuerte» y tiene claro que «cualquier partido puede ser el primero de ese cambio de dinámica». «El equipo está trabajando muy bien y pienso que hay que ser optimista porque en cualquier momento esto puede cambiar», confía.

Obviamente, el centrocampista del Amorebieta reconoce que «a todos nos hubiese gustado ganar los últimos partidos y empezar bien el año». No obstante, no ha podido ser por uno u otro motivo. «El equipo ha estado cerca. Alguno lo hemos perdido con fallos del VAR, otros porque nosotros no hemos estado acertados», desgrana Alex Carbonell.

El domingo en Lezama arranca un mes de febrero absolutamente crucial para el Amorebieta. A estas alturas y con el panorama que tienen los zornotzarras, todo son finales. Por eso poder contar con el factor campo a favor debería ser un acicate para sacar los partidos adelante. «Jugamos el primero de los tres partidos que tenemos en casa este mes, es muy importante jugar en casa. Necesitamos a la afición cerca, que venga la mayor gente posible y nos anime», pide.

El primero de los rivales que pasarán por el campo 2 de Lezama es el Racing de Santander, que encadena tres derrotas consecutivas. Pese a todo, Carbonell tiene claro que «es un equipo muy fuerte, con un entrenador que tiene las ideas muy claras y que lo viene haciendo bien desde hace tiempo». «Tenemos que estar muy concentrados, muy atentos, y tener controladas las dos áreas. Tenemos que intentar aprovechar al máximo nuestras ocasiones y que ellos no nos hagan nada de peligro», manifiesta al mediocentro azul.

Primero con Mujika y ahora con Jandro, Carbonell tiene galones en el equipo. Es el encargado de llevar la batuta, con mayor o menor tino, y por sus botas pasa buena parte del fútbol de los zornotzarras. De ahí que sea casi un imprescindible esta temporada. Ha participado en veintidós de las veinticuatro jornadas disputadas, partiendo de inicio en dieciocho ocasiones.

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