El Leioa se estrena con un triunfo de mucho peso en La Florida

Los dos equipos saltaron al verde con mucho respeto, sin querer cometer errores y arriesgando lo mínimo posible. De este modo, el primer tiempo fue muy parejo. Ninguno de las dos escuadras se hacía con el control del juego y las ocasiones de gol brillaron por su ausencia. Prácticamente no tuvieron trabajo los guardametas. El primero que estuvo cerca de romper la igualdad fue Ibargoien para los locales cuando justo se había cumplido el primer cuarto de hora de encuentro.

El extremo recibió un balón de cara de Ubis y este fintó y disparó a puerta, con la única oposición de Barandiaran. Sin embargo, el tiro fue muy centrado y no puso en excesivos aprietos al portero. La nota negativa del choque fue la lesión de Luisma Villa, que se retiró a los 25 minutos de juego con ostensibles gestos de dolor en la rodilla. El sol no dejó de irradiar sobre el césped de La Florida y eso pareció influir en el ritmo del envite. Muy bajo todavía en este comienzo liguero.

Sin embargo, el Leioa creció con el paso de los minutos y terminó mucho mejor la primera mitad, atosigando a los jarrilleros. Gozaron de constantes acercamientos y dispusieron de varios saques de esquina. En mitad de ese guion, pudieron estrenar el marcador a los 38 minutos. Sergio García, que el curso pasado militaba en el cuadro portugalujo, volvió a hacer gala del guante que tiene en la pierna izquierda colgando un excelente centro para que Galarza metiera la cabeza y batiese a Ibon González.

Era normal que Patxi Salinas no estuviera contento con la actuación de los suyos y realizó las primeras dos sustituciones al descanso. Los jarrilleros crecieron en la segunda parte, llevó la batuta del choque y estuvo gran parte del tiempo en campo contrario. Lo intentaron varias veces los portugalujos. Quicala Bari y Edu Ubis lo intentaron sin suerte. Mientras, el Leioa esperaba más agazapado, sin ningún tipo de prisa, con el objetivo de mantener la ventaja y llevarse los tres puntos.

Los planes le salieron bien a los de Urtzi Arrondo, aunque tuvieron que sufrir mucho en el tiempo de descuento. Barandiaran terminó siendo determinante en la victoria de los suyos, con dos intervenciones salvadoras en el tiempo de descuento. Primero rechazó un disparo cruzado de Ibargoien y después, en la más clara del Portugalete, metió la mano lo justo para evitar que una gran vaselina de Edu Ubis supusiera el empate. Victoria de mucho mérito para los leiotarras en un campo donde no se le suelen escapar muchos puntos a los locales.