Ibra Dieng se va a jugar en Suiza

Pese a su juventud, 22 años, ya ha actuado en 88 encuentros de Segunda B y cinco de Copa del Rey. En el Haro, 23 partidos de Liga, con 962 minutos, 7 goles y una asistencia antes de que el confinamiento por la pandemia cercenara todas las competiciones. La idea de Ibra Dieng, que compartió piso en Haro con Facu Ballardo, centrocampista de origen argentino, una de las revelaciones del campeonato de Segunda B, versaba en marchar al extranjero, aunque le habían sondeado desde algunos clubes del Grupo IV español. A Dieng, un delantero fuerte y muy veloz, le sometieron hace tres años a una prueba en Lezama, en un ensayo de 11 contra 11 en el Campo 5. Sin embargo, no pasó el corte y reclutaron finalmente a Diarra, ahora promocionado del Basconia al Bilbao Athletic con sus 13 tantos en Liga, desde La Txantrea. «Sí, no pudo ser tras aquel partidillo en Lezama, aunque no se puede mirar el pasado, solo me fijo en el ahora. Solo vivo el presente», subrayaba el espigado delantero, de 1'92, al que le faltó técnica para convencer del todo en el club rojiblanco y ahora rumo a Suiza para cumplir un nuevo reto como futbolista profesional.

Dieng (18-11-97) es el pequeño de ocho hermanos, que vivía en los aledaños de Dakar, en Leona Thiaroye, pueblo pesquero de Senegal donde dio sus primeras patadas al balón entre los recovecos que permitían los barcos atracados en su puerto. Un día se metió de polizón en un barco rumbo a Tenerife. De ahí a Bilbao por la intermediación de la amiga de su madre para instalarse posteriormente en un centro de acogida del barrio de San Antonio de Amorebieta. José Félix Gallastegi, entonces director deportivo de los Azules, le reclutó para el Juvenil de SD Amorebieta al ser alertado por las condiciones innatas del chaval. Ibrahima ascendió con celeridad a su equipo de Segunda B, donde el Eibar se fijó para su filial, el CD Vitoria. Tras su escala en Haro sigue su carrera en el corazón de Europa, el sueño de cualquier chico senegalés con anhelo de triunfar como futboli