Igor Núñez, tras el partido ante el Izarra. El Correo

«La sensación de frustración es fuerte», afirma Igor Núñez (Cultural Durango)

El técnico de los blanquiazules lamenta la multitud de ocasiones falladas en un partido dominado con claridad por los suyos

fernando romero

Durango

Sábado, 22 de septiembre 2018

«Es difícil explicar cómo un equipo que genera tantas ocasiones de gol claras no se lleva este partido». Simple y directo. Ese era el sentimiento de Igor Núñez al término del encuentro ante el Izarra, en el que los navarros se han impuesto merced ... a su mayor acierto en Tabira. «Nosotros hemos sido dominadores de principio a fin. Hemos puesto el fútbol y las ocasiones, pero no hemos sido capaces más que de hacer un gol. Y nos hemos encontrado ante un rival al que ahora mismo le favorece todo y que generando muy poco es capaz de hacer goles», lamentaba el preparador blanquiazul.

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Quien haya tenido la oportunidad de presenciar el encuentro, entenderá las palabras y el pesar del técnico. «En esta categoría, si un equipo te hace las ocasiones que hemos hecho nosotros, te llevas una goleada. Y sin embargo, hemos hecho un gol a duras penas después de diez ocasiones. Es un dato que nos está lastrando. Sí o sí tenemos que mejorar esa cifra porque la categoría lo exige», insistía.

«La sensación de frustración es fuerte. Es una pena que un equipo como el nuestro, que está dando tantísimo, exponiendo tantísimo en el campo, tenga tan poco premio semana tras semana», proseguía en su análisis post partido el míster de la Cultural de Durango. Esta derrota, la cuarta en cinco partidos para los de Tabira, ha hecho mella en la caseta. Más que por el resultado en sí, por la forma en la que ha llegado. «El vestuario ahora mismo no está bien. Cuando pones tanto esfuerzo en conseguir un objetivo, cuando no se logra por las circunstancias que hemos visto en este partido, te sientes frustrado. Y es un sentimiento lógico», indicaba Núñez, al mismo tiempo que manifestaba que «hay que revertir esta situación cuanto antes».

El técnico de Llodio admitía que «desde lo emocional, el golpe es fuerte, sobre todo cuando tienes la sensación de que estás dominando». Un mazazo que se hizo evidente sobre el terreno de juego durante unos minutos, tras encajar el segundo tanto, obra de Laborda. «Se da la circunstancia de que la acción que precede al gol es un mano a mano nuestro que lo saca el portero. Y en esa contra hay un centro, un remate que queda rechazado, con la mala suerte de que se le queda al delantero para empujarla», describía. Apenas 15 segundos de juego que cambiaron el partido por completo.

«No hay muchos aspectos del juego en los que nos estén superando ahora mismo, pero el acierto de cara al gol… ahí no tenemos una dinámica positiva en ese sentido. El trabajo tiene que estar dirigido no a hacer más cosas, sino a hacerlas mejor. A tener en esos últimos metros más eficacia. Ahí tenemos que poner el foco», aseguraba el técnico de una Cultural de Durango que la próxima jornada tendrá que visitar El Sardinero para medirse al Racing de Santander.

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