La Cultural cae por la mínima en Anduva

El técnico local varió el sistema de juego para medirse al colista, con un centro del campo en rombo al que le costó elaborar acciones de peligro en los primeros compases. Por su parte, el cuadro vizcaíno saltó al césped con las ideas claras. Comprometido en tareas defensivas y lanzando rápidos contragolpes para tratar de hacer daño a la zaga rojilla. El lateral Txopitea probó fortuna con un disparo raso desde el vértice del área que hizo emplearse a fondo a Limones, que despejó con acierto.

El Mirandés controlaba la posesión, pero sin generar oportunidades claras. Solo en tiros de larga distancia buscaron la portería vizcaína. Matheus ejecutó un remate desde la frontal que atrapó Errasti por bajo. También lo intentó Álvaro Bravo que no conectó bien el lanzamiento. La pelota llegó a colarse en la red del marco visitante en un testarazo de Sergio González tras la falta ejecutada por Antonio Romero al corazón del área. Pero el asistente levantó el banderín para invalidar la acción por fuera de juego.

No lo veía nada claro Jiménez desde el área técnica ya que, superada la media hora de juego, mandó a calentar a tres hombres de refresco. Incluso la Cultural tuvo la opción de ponerse en ventaja tras un error de Odei. Amorrortu se adentró en el área para servir el balón casi en bandeja a Pradera que ya se encontraba con la caña preparada. Sin embargo, el central mirandesista solventó su fallo anticipándose al remate.

Cuando el partido se aproximaba al descanso, los locales hilvanaron una gran jugada de ataque. Hugo Rama encontró la respuesta de Errasti, que desvió lo justo el remate del gallego. El balón golpeó en el larguero y Claudio Medina, muy atento, aprovechó el rechace para marcar (1-0). Ernest sustituyó a un desaparecido Yanis tras el descanso. El jugador ghanés enseguida le dio mayor mordiente al equipo con su desborde por banda izquierda. De sus botas nació una buena ocasión, pero su disparo se escapó por encima del marco.

El Mirandés dominaba la situación, aunque su exigua renta no permitía ningún tipo de relajación, y más ante un rival que demostró buen trato de balón. El ritmo fue decayendo, circunstancia que quiso aprovechar el conjunto blanquiazul para buscar la igualada. Ekain cabeceó desviado un centro desde la parte derecha. Acto seguido, y en una acción similar, aunque esta vez tras una falta, el mismo protagonista no encontró el objetivo deseado.

Incluso Beñat Alberdi tuvo la oportunidad de empatar en el descuento con un libre directo que tropezó en la cabeza de Claudio Medina. El público acabó pidiendo la hora, pero los tres puntos se quedaron en casa del Mirandés.