Azcona recalará en el filial de Osasuna

«Llegué siendo un niño y me voy siendo una persona diferente. Ahora toca mirar otros retos con la misma ilusión», señalaba el delantero, de tan solo 20 años, que acaba contrato este 30 de junio y que ahora se enrolará en el segundo escalón de Tajonar. Azcona, que necesita minutos y protagonismo, se despedía con sentimiento de Lezama: «Con tan solo 13 años tomé una decisión que marcaría mi vida, salí de casa en busca de un sueño y la vida me dio el privilegio de formar parte de un club único y de poder defender esta camiseta», narraba. Azcona ha recibido propuestas de varios filiales y de otros equipos, aunque parece que se decanta por recalar en Osasuna para coger de nuevo carrerilla con un contrato de dos o tres temporadas.

En categorías inferiores, el punta de Andosilla, que fue internacional Sub-17, había descollado por su facilidad anotadora. El joven ariete navarro fue atado por el Athletic sellando un contrato de tres campañas más en septiembre de 2018, pensando en que explotaría. A Azcona (12-3-2001), aunque le ha costado adaptarse a la exigente Tercera División vasca, las lesiones le han laminado en momentos claves, con una latosa lesión en el menisco externo justo cuando emergía. En el Basconia sus números han sido discretos: 28 partidos y 7 goles en la 2018-19, 10 partidos en la 2019-20, con uno en el filial en el arranque de aquella campaña, y 16 envites y 1 gol este curso recién finalizado a las órdenes de Patxi Salinas.

Azcona, fichado del Falcesino en la temporada 2014-15, pulverizaba todas las marcas de la factoría rojiblanca con los 52 goles que anotó en las filas del Cadete de Liga Vasca. Sumó 34 goles en 23 partidos de Liga con el Juvenil Nacional, antes de ascender al Juvenil de Honor, anotando otros cuatro más en seis partidos. En total: 38 el curso antes del salto a Tercera. Un delantero rematador, de área, potente de piernas que ahora tratará de reivindicarse en Osasuna Promesas, donde puede relanzar su carrera más cerca de Andosilla.