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Vivian en uno de los partidos de la pasada temporada. Athletic Club

Cuenta atrás con Vivian

El prometedor central vitoriano del filial, Dani Vivian, a caballo con el primer equipo, lleva purgando una lesión en la espalda desde hace un par de meses. Pese a la cautela, está próximo a reaparecer

javier beltrán

Jueves, 19 de diciembre 2019, 16:28

Dani Vivian se entrenaba en la mañana del miércoles con relativa normalidad en la sesión del primer equipo en Lezama junto a Areso, que volvía del viaje de Elche tras el envite de Copa ante el Intercity, Sancet y Guruzeta. El central vitoriano, de 21 ... años, lleva purgando una lesión en la espalda desde hace un par de meses, con lo que se ha perdido los partidos del filial desde la séptima jornada y no ha podido tampoco participar con asiduidad en el lote de Gaizka Garitano.

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Lo cierto es que de ayer, el que está llamado a ser heredero de los Yeray, Unai Núñez e Iñigo Martínez por potencial y carisma, hizo solo parte del entreno, sobre todo los rondos y transiciones. Poteriormente abandonaba la sesión antes de los partidillos y bajaba a tratar su dolencia con los médicos en el área reservada al filial. Las sensaciones son buenas, pero el joven zaguero, que ejerce de cuarto central del primer equipo, no llega a tiempo para el derbi ante el Sanse en el Reale Arena. En un par de semanas se confía que entre en liza. Joseba Etxeberria, técnico del filial, echa en falta el concurso de Vivian y de Sillero, en teoría su tándem de centrales titulares, con Luengo y Murua tirando del carro, junto a Paredes, que también echa un cable desde el Basconia para mantener a flote la defensa del filial rojiblanco.

Vivian, central vitoriano cosecha del 99, formado en el Santutxu antes de ingresar en Lezama en verano de 2016, ha disputado cinco partidos, con dos goles al Haro en el 1-4 de El Mazo y ante el Salamanca en el 4-0 en la factoría de Lezama en tan solo 450 minutos. Siempre destacando por su velocidad y por su robustez aérea en las incorporaciones al ataque. Después, la espalda y sus complicaciones le han dejado lastrado en talleres para superar un trance doloroso y lento para su recuperación total, con altibajos que todavía no le han permitido reaparecer y gobernar de nuevo la zona de retaguardia del filial.

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