Aitor Larrazabal: «Nos ha tocado un club histórico y con mucho poder»

Entre los posibles rivales del cuadro fabril, el Hércules es el conjunto que menos puntos ha sumado en su grupo. El Cartagena ha terminado la temporada con un total de 75 puntos, la Ponferradina ha sumado 69 unidades y la escuadra alicantina ha acumulado 67 puntos, tras vencer en 19 choques, empatar diez y perder otros nueve. Larrazabal no relaciona el número de puntos con el nivel de cada equipo, ya que «los grupos son muy diferentes», explica. El entrenador del conjunto gualdinegro admite que «no tenía ninguna preferencia» aunque, a su vez, reconoce que «por distancia y porque atraería a más seguidores habría preferido a la Ponferradina, pero ahora solo toca pensar en el Hércules».

Los blanquiazules, esta campaña, se han caracterizado por su gran solidez. «Su parcela defensiva y su bloque sólido es manifiesto», remarca Larrazabal. En los 38 encuentros de Liga únicamente han encajado 24 tantos. Esta cifra les convierte en el equipo menos goleado de su grupo y en el cuarto conjunto que menos tantos en contra recibe de toda la categoría de bronce. El cuadro fabril también se ha sustentado en su buena actuación defensiva. Por ello, el míster de Loiu señala que «jugamos de una manera muy similar» y está convencido de que «ellos tampoco piensan que seamos un rival cómodo ni mucho menos».

El Hércules es un equipo con grandes facultades a balón parado, por lo que Larrazabal se marca como asignaturas pendientes para esta semana el trabajar el juego aéreo y no cometer excesivas faltas ni córners. Asimismo, destaca la juventud del Barakaldo ante la experiencia y veteranía que rige en el vestuario del Hércules. «Ahí pueden marcarse las diferencias, tanto para bien como para mal», apunta.

«Nos encomendamos a Lasesarre, porque es el primer partido y siempre necesitamos sacar un resultado positivo», mantiene Aitor Larrazabal. El entrenador gualdinegro incide en la importancia de no encajar en el primer choque para «mantener la eliminatoria viva y ofrecer allí nuestra mejor versión». «Tenemos que estar muy vivos en los dos partidos, porque si no lo estamos en uno de ellos, condenamos la eliminatoria», concluye.