El Arenas acaba con la hegemonía del Bilbao Athletic en los derbis vizcaínos

Sobre la bocina. El Arenas acabó con la hegemonía del Bilbao Athletic en los derbis vizcaínos, donde sumaba por victorias los tres que llevaba disputados, gracias a un tanto de un recién entrado Uche, el más listo en un barullo dentro del área rojiblanca. Ambos equipos derrocharon intensidad, fases de buen juego y desgaste físico en una desapacible tarde-noche en Gobela.

El técnico local, Jabi Luaces, dio más músculo a su ataque con la entrada en el once inicial de Zamorano y Dani López en los puestos de Uche y Urkiza que, junto al guardameta Carrio, fueron los tres cambios respecto al encuentro de la pasada jornada frente al Real Unión que acabo en empate. Por su parte, Garitano contó con el refuerzo de Nolaskoain, uno de los descartes de Berizzo para el partido contra el Valencia.

Ambos equipos comenzaron imprimiendo un ritmo muy alto a cada una de las acciones. Los 'cachorros' dejaron bien clara su a puesta por los envíos en largo, intentando ganar la espalda a los defensas rivales frente a un conjunto rojinegro más combinativo ejerciendo mucha presión. Así, los locales fueron los primeros en intentar inaugurar el marcador, en un disparo desde el vértice del área a cargo de Aitor Ramos, pero el lanzamiento le salió desviado.

El filial rojiblanco dispuso de un doble ocasión en un centro-chut de Larrazabal que Carrio despejó con bastantes apuros. El rechace le cayó a Villalibre, que conectó un duro y ajustado disparo que se marchó fuera cerca de la base del poste derecho. Un par de minutos después, gozaron de su mejor oportunidad en una falta directa al borde del área botada por Nolaskoain, pero terminó estrellando el esférico en la barrera.

Una jugada que unos minutos después se repitió en el otra área con Julen como protagonista pero no estuvo atinado enviando el balón por encima del larguero. Sin un dominador claro, el partido era un costante toma y daca bastante entretenido para la numerosa parroquia que se dio cita en Gobela, pese al inusual horario del encuentro.

En este intercambio de llegadas llegó la mejor para el bando getxotarra, tras un buen centro de Aitor Ramos que Zamorano, en boca de gol, no acertó a rematar con todo a su favor para batir a Oleaga. Pasada la media hora de encuentro, Carrio se hizo grande para meter una espectacular mano en respuesta a un misil surgido de las botas de Villalibre, cuando ya se cantaba el tanto. La pelota llegó a Larrazabal que, sin dudarlo, armó la pierna para conectar un buen disparo, pero se volvió a topar con el guardameta del 'Histórico'.

Tras el paso por vestuarios, la escuadra dirigida por Gaizka Garitano dio un paso adelante. Se hizo con el mando de la pelota, pero la presión solo duró unos minutos gracias a la solvencia de los locales a la hora de buscar espacios para ir hacia adelante. Sin la lucidez ofensiva mostrada antes del descanso, si bien es cierto que los fuertes aguaceros complicaron el desarrollo del encuentro, la primera oportunidad de este periodo fue para el bando rojiblanco, protagonizada de nuevo por un Villalibre que, bien cubierto por dos defensores, no pudo dirigir bien su lanzamiento.

Pero sin lugar a dudas, el local Dani López desperdició una de las ocasiones más claras de todo el encuentro, cuando con Zamorano totalmente desmarcado y esperando el centro de su compañero dentro del área, el ariete madrileño se retrasó en demasía a la hora de ceder la pelota, lo que permitió a un defensa rojiblanco desbaratar cualquier atisbo de peligro.

Con el partido totalmente roto, los veintidós jugadores se convirtieron en gladiadores, entrando en cada disputa o balón dividido como si fuera el último. Precisamente, este pundonor recompensó a los locales cuando, con el tiempo reglamentario cumplido, Uche aprovechó un barullo en el área para conectar un remate al fondo de la red que dejaba los tres puntos en casa.