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iñigo sánchez de luna
Getxo
Jueves, 23 de enero 2020, 22:06
El entrenador vizcaíno del Unionistas de Salamanca, Jabi Luaces, acabó «muy orgulloso y satisfecho del trabajo de mis jugadores», el encuentro de Copa del Rey frente al Real Madrid, que terminó con victoria merengue no sin sufrimiento. «Competimos todo el encuentro y con el 1 ... a 2, contamos con dos ocasiones para empatar y el tercero nos lo metieron al final», recuerda.
Para el extécnico de Portugalete, Gernika y Arenas destaca que este tipo de citas «al final son un partido más, pero no lo que le rodea con un rival lleno de estrellas y con un entrenador como Zidane». Lo visto en las Pistas del Helmántico «es lo mismo que venimos haciendo desde que me hice cargo del equipo», hace once jornadas.
Luaces asumió la responsabilidad de dirigir a los charros con el equipo en descenso y con él en el banquillo suman cinco victorias, tres empates y el mismo número de derrotas que les ha permitido escalar hasta el puesto de promoción para eludir la pérdida de categoría. El 'míster' de Busturia reconoce «no tener ningún secreto», para esta buena racha a la que se une los triunfos en Copa del Rey frente al Atlético Baleares y Deportivo de La Coruña.
Los cimientos para reconducir la trayectoria de los salmantinos pasan por «utilizar las mismas herramientas que en mis anteriores equipos, preparar bien los encuentros, entrenamientos intensos en el aspecto físico y táctico y alegría a la hora de saltar al terreno de juego». A ellos, se une «la calidad y cantidad de jugadores que tengo a mi disposición».
Centrado en la competición regular resalta que «hemos empezado la segunda vuelta con doce equipos muy comprimidos a día de hoy». Si bien «falta mucho para acabar la Liga, la salvación va a estar muy cara con muchos candidatos a perder la categoría», advierte desde su nuevo destino donde «me encuentro muy a gusto, puedo trabajar libremente».
Uno de los rivales directos en esta lucha por intentar mantenerse una campaña más en la categoría de bronce del fútbol nacional, es su exequipo Arenas. Cuestionado sobre la situación que atraviesan los rojinegros en descenso asevera rotundamente que «no tengo nada que hablar, lo deben hacer ellos, me limitó a estar centrado en mi equipo».
De su etapa en el banquillo de Gobela que terminó con su destitución a falta de siete jornadas para concluir el campeonato con el equipo situado en decimotercera posición, la recuerda como un «año muy duro con muchas lesiones, pero siempre he sido el mismo profesional en cualquier banquillo que he estado», concluyó.
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