Alain Arroyo entrenará al Somorrostro

Aunque en principio parecía que Alain Arroyo sería el segundo técnico de la Cultural de Durango con Jon Larreategi al frente, un giro inesperado de los acontecimientos le devuelve al Somorrostro, precisamente su último equipo en activo este curso, para ocuparse esta vez de su banquillo en sustitución de Iñaki Pola. El Somo, del que ya se había despedido su director deportivo, Ander Vidal, hace semanas rumbo al Sestao River, lanzaba un comunicado oficial este mismo martes respecto al míster con el que había terminado una brillante temporada rozando el larguero del playoff express de ascenso, con una plantilla muy joven que antes habían confeccionado el tándem Ales Cano-Iván Rodríguez: «Iñaki Pola no continuará como entrenador de la primera plantilla la temporada 2020-21 por motivos profesionales y personales. Desde el club le queremos agradecer su dedicación y profesionalidad durante el tiempo que ha estado con nosotros«, resumía al respecto sin profundizar demasiado.

Según ha podido saber EL CORREO, Alain Arroyo (5-7-82) será el técnico del equipo en El Malecón. Un Somorrostro semidesmantelado, ya que sus mejores mimbres van encontrando acomodo: Rafa Villanueva al Arenas de Segunda B, Xabi Mayordomo a la SD Leioa, Aitor Cuenca que vuelve al filial del Alavés, o Ander Blanco, que baraja varias propuestas de clubes que se juegan el playoff express a la categoría de bronce y sigue en la agenda de varios equipos de la Segunda B vizcaína. Por tanto, el proyecto arranca de nuevo en un verano que se presume muy largo y pendiente del móvil para Alain Arroyo.

Alain Arroyo, que fuera un bravo delantero, colgaba las botas recientemente del fútbol en activo con una emotiva carta en la que repasaba su amplia trayectoria, en la que destaca sus pasos por Getxo, Arenas, Portugalete, Alavés B, Sestao River, Lemona, Guadalajara, Mirandés, en Segunda, Oviedo, Barakaldo, Zamudio y Somorrostro. Destaca además un partido en las filas de la selección vizcaína en San Mamés ante el Athletic en la que marcó un gol el 5 de junio de 2013, el último en el mítico estadio antes de su demolición, con clase y descaro, dos características que le han distinguido en el campo y por las que ha dejado muchos amigos. «De un día para otro te cambia la vida, pasa un tren y dudas si subir o no, y hay que afrontarlo con determinación. Antes de que el fútbol te deje, y no tengas equipo al que ir por tu edad y por tus condiciones, he decidido dejarlo yo y seguir peleando por los nuevos sueños, nuevos retos que seguro seguirán siendo igual de intensos y gratificantes que los anteriores», señalaba el ya exariete en su premonitoria misiva en las redes sociales.

Alain Arroyo no deja ni botar la pelota para afrontar su nueva misión de técnico en Tercera División tras hacer sus pinitos en categorías inferiores y sacarse los carnets pertinentes para seguir enfundado con el chándal, esta vez en la banda y con mando en plaza.