Setién a Messi: «Si no te gusta lo que digo, ahí tienes la puerta»

Fue en Vigo, en Balaídos. El 27 de junio. Iago Aspas ha empatado el encuentro en el minuto 88 y el Barcelona se ha dejado media Liga frente al Celta. El vestuario culé ardía. El título se alejaba y el Madrid ya preparaba sus vitrinas, como al final ocurrió. Quique Setién entró en la caseta y comenzó con su charla posterior a esa igualada. Sus palabras no gustaron nada a Leo Messi, el capitán. Entendió que el preparador cántabro echaba a los pies de los caballos a unos futbolistas de prestigio mundial, que sus comentarios eran injustos. El argentino, enfadado, se lo reprochó y pidió respeto para una plantilla con más trofeos que los que posee el entrenador. Entonces, el santanderino no se pudo aguantar. «Si no te gusta lo que oyes, ahí tienes la puerta», le espetó, según desveló ayer la cadena Ser.

¿Cuál fue la reacción del sudamericano? Una sonrisa condescendiente, del que sabe que tiene la sartén por el mango. También Luis Suárez, autor de un doblete en ese duelo, la tomó con el cuerpo técnico. Había sido sustituido y cuando la prensa le preguntó que le sucedía a la escuadra azulgrana lejos del Camp Nou, que se desengraba, cargó contra los preparadores.«¿Que qué pasa fuera de casa? Para algo están los entrenadores», atizó el futbolista uruguayo. El ariete ahora del Atlético fue sustituido y tuvo un pequeño rifirrafe con Eder Sarabia, ayudante de Setién.

De hecho, las imágenes que tanto dieron que hablar de Messi ignorando al hijo de Manolo Sarabia se produjeron en este encuentro. En una pausa para la hidratación, el vizcaíno se acercó al capitán para darle una serie de indicaciones, pero el rosarino pasó del tema, y siguió a lo suyo, lo que demostró que la relación entre la estrella azulgrana y los preparadores no era la mejor.

Mientras tanto, al Barcelona se le acaba el tiempo para llegar a un acuerdo con sus trabajadores para la reducción de sueldo. El club, ahora sin presidente tras la dimisión de Josep Maria Bartomeu, tiene hasta el jueves para alcanzar un pacto sobre una medida que pretenden suponga una rebaja del 30% de la nómina, unos 190 millones de euros. Los futbolistas, con Messi a la cabeza, todavía no han dado el brazo a torcer, pero varias fuentes señalan que el ambiente ha mejorado sin el exmáximo mandatario en la mesa de negociación. Y, según medios catalanes, quieren ayudar, pero el tiempo corre. Para los futbolistas, además, es fundamental saber cuándo serán las elecciones y así conocer el proyecto de los futuros dirigentes.El presidente en funciones, en este sentido, dijo ayer que «serán alrededor de las fechas de Navidad», en función de la situación de la pandemia.