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carlos nieto
Miércoles, 21 de septiembre 2022, 11:11
La última imagen de Leo Messi en Barcelona que el aficionado recuerda es la de astro argentino envuelto en lágrimas por tener que abandonar -muy a su pesar, dijo- el club azulgrana que le acogió cuando apenas tenía 12 años. La información oficial hablaba de ... que las dificultades económicas de la entidad impedián mantener un contrato millonario de la envergadura del de Messi. Ambas partes, jugador y club, se intercambiaban elogios en público porque las intenciones del futbolista era acabar su vida profesional en Barcelona y la del club que el probablemente mejor jugador de la historia colgara las botas en la Ciudad Condal. Por lo que ahora se sabe, hubo más aspectos que impidieron su continuidad. El Mundo ha revelado las pretensiones del '10' que Joan Laporta y su equipo directivo no pudieron asumir después de que el expresidente Josep Maria Bartomeu, que dimitió en octubre de 2020 de su cargo, también rechazase las peticiones del astro rosarino.
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Messi reclamó prorrogar tres años su millonario contrato con las mismas cantidades, es decir 75 millones de euros netos al año. Quería recuperar con intereses los recortes que aceptó aplicarse en sus emolumentos durante el covid. Se redujo un 30% su salario en la campaña 2020-21 y pidió cobrarlos con un 3% de interés. Si al cabo de los tres años Messi decidía seguir una temporada más, la decisión sólo dependería de él y el club debería de asumirla.
Sus demandas no paraban ahí. Exigió que desapareciera la cláusula de 700 millones y sustituirla por una ridícula de 10.000 euros. Pidió un bonus de diez millones de euros sólo por estampar de nuevo su firma en el contrato de prolongación de su relación con el Barça por otros tres años. Laporta aceptó ingresar esa cantidad en su cuenta, pero le pidió que aguardara a que la entidad azulgrana volviera a ingresar en sus arcas 1.100 millones de euros. Los intermediarios de Messi rechazaron la oferta.
Al margen de las cantidades económicas exigidas para renovar, Messi incluyó en sus peticiones disponer de un palco privado para su familia y la de Luis Suárez en el Nou Camp y un vuelo en Navidades a Argentina. Tal y como publica 'El Mundo', Bartomeu llegó a aceptar la gran mayoría de las pretensiones del actual jugador del PSG. Todas menos la de rebajar la cláusula de 700 millones a la irrisoria cifra de 10.000 euros. La familia del astro argentino, según publica 'La Vanguardia' no desmiente la información y la considera normal en un proceso de negociación que no llegó a buen fin y que supuso el fin del ciclo de 17 años de Messi en el Barça. «He hecho todo lo posible para quedarme», dijo en su despedida.
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