El Amorebieta tumba al Levante a domicilio y sigue vivo en Copa

La que podría denominarse segunda unidad del Amorebieta logró meter al conjunto zornotzarra en la siguiente ronda de Copa del Rey, tras imponerse por la mínima al Levante en el Ciutat de Valencia en la que es su primera victoria como visitante de la temporada. No computa para la liga, pero sin duda es un chute de moral importante. Porque los azules olvidaron por un momento todas las penurias que les acompañan en el campeonato doméstico y con un equipo plagado de suplentes de lujo plantaron batalla y superaron al gigante de Orriols.

Los vizcaínos plantearon un partido de desgaste en el primer periodo en el que apenas hubo ocasiones y dieron un paso adelante en el segundo. Fueron superiores a los de Calleja y buscaron con insistencia el gol, que acabó llegando mediado el segundo periodo, cuando Javi Eraso cazó un rechace en el punto de penalti para mandarlo al fondo de la portería de forma sutil.

El equipo de 'meritorios' -que bien podría ser un once muy reconocible también en Liga- con el que el Amorebieta saltó al terreno de juego del Ciutat de Valencia tuvo las ideas muy claras. El plan de partido pasaba por mantener el orden defensivo y buscar el desborde y la velocidad por las bandas, especialmente por la derecha donde Mier y Quintero se asociaron especialmente bien. Enfrente estaba un Levante también con un equipo muy renovado que trató de impresionar en el arranque pero se fue enredando en el entramado planteado por los de Urritxe, que recuperaron el 4-5-1 para poblar el centro del campo.

Ambos equipos dieron un par de avisos en el primer cuarto de hora pero a los dos les faltó contundencia en el remate. El duelo discurrió con mucha igualdad y momentos de alternancia en el mando. Se jugaba con ritmo e intensidad, pero las ocasiones se vieron con cuentagotas. Algún disparo lejano, el balón parado… poco más por parte de azules y granotas.

Las acciones más claras llegaron pasada ya la media hora. Lo intentó primero el Levante por mediación de Óscar Clemente, que recortó dentro del área para dejar sentado a Ryan Edwards, aunque luego su remate blandito lo atajó sin problemas Jonmi Magunagoitia. La más clara para el Amorebieta llegó tras una buena internada de Luis Quintero en el área. Sin embargo, su pase atrás lo interceptó Postigo cuando Edwards estaba ya listo para fusilar.

La segunda mitad estuvo mucho más entretenida, de largo. Arrancó ya con un disparo con mucha de Jauregi apenas transcurridos unos segundos. Fue tan solo un aviso, porque el Amorebieta se volcó en ataque. Puso cerco al área granota y empezó a acumular llegadas y oportunidades una tras otra. Quintero mandó el balón arriba tras tirar un doble recorte y sentar a su par, Andrés Fernández le negó el gol a Rayco en un remate de cabeza del canario, Dela le quitó de las botas el remate a Ryan el el pico del área pequeña… Así hasta el minuto 70, cuando Javi Eraso recogió en el punto de penalti un rechace que embolsó con un toque sutil de primeras.

A partir de ahí, llegó el esperado toque a rebato del Levante, con más empuje que acierto, dicho sea de paso. Y en las pocas veces que llegó a inquietar de verdad, emergió la figura de Jonmi Magunagoitia. El arquero zornotzarra salvó un par de mano a mano con Buba y Clemente. Pero la mejor intervención de todas llegó cuando el crono superaba ya el tiempo de añadido. Un vuelo sin motor para sacar una mano salvadora a remate de Dela a bocajarro.

Ahora, los vizcaínos confían en que en el siguiente sorteo, que tendrá lugar el 12 de diciembre ya con la presencia de los equipos que disputan la Supercopa, la fortuna se ponga de su parte para que el vetusto Urritxe pueda ser el escenario en el que disputen la siguiente eliminatoria al abrigo de su afición, obligada a mudarse a Lezama cada quince días.

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