Las cinco revelaciones del fútbol europeo

La gran sorpresa en el fútbol español tiene nombre propio: Bryan Zaragoza. Cualquiera que haya visto un partido del Granada no ha podido pasar por alto a este menudo extremo malagueño pues su juego es tremendamente vistoso. Bryan es un futbolista eléctrico, con una habilidad innata para el regate y capacidad goleadora. La temporada pasada, en Segunda división, fue un revulsivo habitual, pero en este curso se ha ganado la confianza de Paco López y ha sido titular en seis de los nueve partidos disputados hasta la fecha, en los que ha anotado cinco goles. Su actuación ante el Barcelona en la última jornada, doblete incluido, le ha encumbrado, y se ganó la convocatoria de Luis de la Fuente con la selección española, con la que debutó el pasado jueves. «Cabrón, no corras más», llego a decirle Ronald Araujo en el partido ante el Barcelona.

La tabla de máximos goleadores de la Bundesliga no la lidera Harry Kane. Ese honor es para Serhou Guirassy. A sus 27 años, el guineano tiene una larga trayectoria en Francia y Alemania, pero ha sido este curso cuando ha desplegado todo su potencial. Lo ha hecho de forma arrolladora. Suma trece goles en siete partidos de Bundesliga. Por poner en contexto sus números, los pichichis de la liga alemana la temporada pasada fueron Füllkrug y Nkunku con dieciséis tantos. Serhou Guirassy nació en Arlés (Francia) y, aunque llegó a representar al país galo en categorías inferiores, optó por la selección de Guinea. El Stuttgart es ahora el segundo clasificado de la Bundesliga y gran parte de la culpa la tiene el excepcional rendimiento de su delantero.

Tras años sin una pareja de centrales de garantías, Micky van de Ven llegó este verano al Tottenham Hotspur para subsanar esa carencia. En apenas tres meses este joven central neerlandés ha formado junto al Cuti Romero una de las mejores duplas en el equipo que ahora mismo lidera la Premier. El ascenso de Van de Ven hasta la élite ha sido meteórico. Dos temporadas en el modesto Volendam y una en el Wolfsburgo bastaron para que el Tottenham pagase 40 millones por sus servicios. Van de Ven es un central zurdo con calidad para la distribución del balón y muy poderoso en el juego aéreo, merced a sus 1,93 metros. Lo que más sorprende en el juego del joven central, sin embargo, es su velocidad.

La salida de Ousmane Dembélé en dirección a París y las lesiones de algunos de sus futbolistas de ataque obligaron a Xavi a apostar por una de las grandes promesas de la cantera culé, Lamine Yamal, que ya había debutado la temporada pasada con el técnico de Terrassa. A pesar de su talento, nadie podía esperar que un futbolista de 16 años, que debería comenzar este año la etapa juvenil, juegue con la desenvoltura con la que lo ha hecho Yamal. Ubicado en el costado derecho, pegado siempre a la línea de cal, Lamine es un futbolista de gran calidad, con tendencia a trazar diagonales hacia dentro y demostrar su gran golpeo ya sea con centros o disparos. Está rompiendo todos los registros de precocidad del fútbol español.

Lamine Yamal no es el único adolescente que brilla en Europa. En Francia ha aparecido Éli Junior Kroupi. Nacido en 2006, ya debutó el curso pasado en Lorient. Su padre, Éli Kroupi, fue también futbolista del Lorient y ha ayudado a su hijo a seguir sus pasos. Éli Junior puede actuar tanto en la banda como en la media punta. Su físico es liviano, pero posee una calidad técnica sorprendente y gran velocidad. Aunque fue suplente en los primeros encuentros, su entrenador, Regis Le Bris, se ha rendido a la evidencia y le ha colocado en el once en los últimos cuatro partidos. El resultado, tres goles y una asistencia.