carlos nieto garcía
Lunes, 31 de enero 2022, 12:47
Aquel 12 de junio de 2021 el mundo del fútbol pudo haber perdido a uno de sus mejores representantes. De hecho, tal y como confirmaron los médicos de la selección danesa, Christian Eriksen (Middelfart, 14 de febrero de 1992) estuvo muerto durante algunos minutos. Durante ... el compromiso en la Eurocopa de su combinado ante Finlandia, el centrocampista se desvaneció y cayó desplomado junto a la banda del Parken Stadion de Copenhague. El ídolo local había sufrido un paro cardiaco y se debatía entre la vida y la muerte, con aquella imagen icónica en la que sus compañeros formaron un círculo alrededor para evitar cualquier toma de imágenes.
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Eriksen pasó entonces una semana hospitalizado, le colocaron un marcapasos y el regreso a la práctica deportiva parecía alejado. Pero no para él. Una vez recuperado, Eriksen manifestó su deseo de volver a disfrutar de lo que más le gusta, el fútbol. Tiene el objetivo de estar en el Mundial de Catar que se celebra a finales de este mismo año y para ello debía regresar a la élite.
Terminó su vínculo con su equipo, el Inter de Milan, donde era una pieza clave en el engranaje ofensivo del campeón de Italia. En el país transalpino está prohibido jugar con un estinulador cardíaco, por lo que Eriksen no pudo seguir ligado al conjunto 'nerazzurro'. Se rumoreó una vuelta a Dinamarca, a una liga menos competitiva en la que no sentiría tanta presión. Inlcuso llegó a entrenar en Holanda, en las filas del Groningen y el Ajax. El regreso estaba cerca.
Sin embargo, en este último día de mercado de fichajes se ha confirmado que Christian se une hasta final de temporada a la disciplina del Brentford, equipo recién ascendido a la Premier League. Se trata de una pequeña ciudad a las afueras de la metrópoli de Londres que ha visto cómo su equipo regresaba a la primera división británica 74 años después. El objetivo de 'las abejas' no es otro que mantenerse en la élite de la mejor liga del mundo. Actualmente los rojiblancos marchan en la 14ª posición, por lo que el reto para Eriksen es mayúsculo. Así lo ha anunciado el club en sus redes sociales.
En Brentford se pondrá a las órdenes de su compatriota Thomas Frank, quien le conoce a la perfección tras entrenarle en la selección nacional cuando Christian era sub-17. No es un destino cualquiera. En la plantilla hay la friolera de ocho jugadores daneses, ahora nueve: Jensen, Norgaard, Jorgensen, Bidstrup, Bech Sorensen, Roerslev, Racic, Lossl y el propio Eriksen. El presidente, Matthew Benham, también es propietario del Midtjylland danés, por lo que las sinergias con el país escandinavo son frecuentes.
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«Hemos aprovechado una oportunidad increíble para traer un jugador de clase mundial a Brentford. Lleva siete meses sin entrenar con un equipo, pero ha trabajado mucho por su cuenta. Está en forma, pero necesitaremos que esté en forma para el partido y espero verlo trabajar con los jugadores y el personal para volver a su nivel más alto», ha dicho Frank tras hacerse oficial el fichaje. Eriksen ha superado unos exigentes controles médicos y está listo para 'redebutar' en el fútbol profesional. «Hola a todos los fans del Brentford, estoy muy feliz de estar aquí. No puedo esperar para jugar en este equipo y espero veros muy pronto», ha comentado el jugador nada más firmar por su nuevo equipo.
El de Middelfart vuelve de esta forma a la Premier League tras su paso por el Tottenham (2013-2020), donde se convirtió en uno de los mejores centrocampistas ofensivos del planeta pese a no ganar ningún título. Rozó la Champions, ya que perdió la final de 2019 ante el Liverpool, disputada en el Wanda Metropolitano del Atlético. Antes de la capital británica despuntó en el Ajax de Amsterdam (2009-2013), club del que fue santo y seña y con el que conquistó todos los campeonatos nacionales.
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Con la selección nacional, aquella camiseta que pudo haber sido la última en vestir, ha disputado 109 partidos en los que ha anotado 36 goles. Ha participado en dos Mundiales (Sudáfrica 2010, fase de grupos; Rusia 2018, octavos de final) y en dos Eurocopas (Polonia y Ucrania 2012, fase de grupos; y la última celebrada por todo el continente, en la que Eriksen apenas disputó 43 minutos de aquel fatídico partido contra Finlandia y en la que Dinamarca alcanzó las semifinales). Ahora, a punto de alcanzar la treintena, Eriksen vuelve a calzarse las botas con el objetivo de seguir sonriendo haciendo lo que más le gusta.
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