Después de 14 encuentros, Marcelo Bielsa fue destituido en 2017 del Lille. Terminó mal el actual técnico del Leeds United con la entidad gala, hasta tal punto que hace unos días arrancó un juicio en el que el mister argentino reclamó 19 millones de euros ... por «acoso» antes de su destitución. El cuadro francés negó la mayor e incluso acusó al extécnico del Athletic de criticar «de manera irrespetuosa» a la directiva y de faltar a su responsabilidad cuando se marchó a Chile para asistir al entierro de su amigo y expreparador físico Luis María Bonini.
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A través de una videoconferencia, Bielsa fue tajante. «Lo que quiero explicar es el acoso que he sufrido en los meses de septiembre y octubre, antes de mi despido -el 15 de diciembre- a fin desestabilizarme y empujarme a la dimisión», contó. «Saboteó mi gestión y obstaculizó mi trabajo, degradando mi autoridad», explicó. De ahí que su solicitud millonaria, una parte en concepto de daños y perjuicios y la otra debido a las cantidades pactadas en sus dos contratos; uno con el Lille y otro con Victory Sports, la empresa de Gerard Lopez, presidente que le contrató entonces.
Por supuesto, el cuadro francés contratacó en un juicio cuya sentencia está prevista para el 2 de julio. Dicen que se negó a obedecer instrucciones, que desafió de manera constante a los rectores y que trató de manera agresiva a los empleados del club.
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