¿Y por qué no un Dinamo San Juan-Athletic en Copa del Rey?

El emparejamiento no ha dejado del todo satisfechos a los diferentes estamentos de la entidad. Su prioridad era disputar este enfrentamiento en su campo. «Para el club habría sido importante jugar en casa por nuestra afición y por ingresos, aunque lo que queríamos evitar era viajar a Orense y Segovia, así que es lo mejor dentro de lo malo», declara el presidente, Álex Díaz. Raúl Quintana, entrenador del equipo, incide en que «preferíamos jugar en casa para que todo el pueblo lo hubiera disfrutado, pero nos ha tocado el desplazamiento más corto, así que lo tenemos fácil para compatibilizarlo con el trabajo».

A pesar de que sea a domicilio, el máximo mandatario está convencido de que la afición se desplazará en masa, como ya hizo en el triangular que se celebró en Nanclares de Oca. «Todos estos días recibo muchos mensajes de gente que me dice que se va a coger el día libre para ir. Cada vez que vas al campo, está todo el mundo hablando de lo mismo», comenta. En cuanto al CD Autol, aún no hay mucha información. «Nos informaremos de lo que podamos mediante algún contacto que les conozca. Es difícil, pero también bonito para un entrenador porque es buscarte la vida al momento durante el partido», indica Raúl Quintana.

Presidente y entrenador confían ciegamente en sus opciones de alzarse con el triunfo y pasar de ronda. El premio de hacerlo no puede ser mayor. En caso de imponerse, recibirían a un conjunto de Primera el fin de semana del 12 y 13 de noviembre. Todos excepto los participantes de la Supercopa –Real Madrid, Barcelona, Betis y Valencia– entrarían en el bombo. Fuese quien fuese el rival, sería una cita histórica para el club e incluso para el fútbol vizcaíno, ya que nunca antes un equipo de División de Honor se ha visto en una situación de tal magnitud. El formato actual de la Copa del Rey lo ha permitido.

Para Díaz, ya ha sido un motivo de orgullo estar ayer presentes en el sorteo. «Era impensable para el Dinamo estar en la sede de la Federación como representante vasco», expresa. Aunque tampoco esconde que ya todos tienen un ojo puesto en lo que ocurriría si pasan esta ronda. «Si pasamos y jugamos contra un Primera, sería el día más grande de la historia del club. Nadie, ni en sus mejores sueños, podía imaginar que el Dinamo pudiera jugar un partido oficial contra un equipo de Primera», resalta. «Es la oportunidad de nuestras vidas en fútbol. Es el premio del trabajo de mucha gente durante muchos años», apostilla el técnico.