Achraf Hakimi, jugador del PSG, acusado formalmente de violación en Francia

Durante su interrogatorio, Hakimi «desmintió con firmeza las acusaciones en su contra», explicó su abogada, Fanny Colin, en un comunicado. La estrella de Marruecos en el Mundial «ha sido, en este asunto, objeto de una tentativa de extorsión», denunció su letrada.

Tras su imputación, Hakimi tendrá la posibilidad de defenderse y de acceder a los detalles del dossier. Su abogada recordó que «la denunciante se negó a presentar una denuncia, rechazó someterse al menor examen médico o psicológico y rechazó enfrentarse a Achraf Hakimi», a pesar de que la acusación contra el jugador se basa exclusivamente en sus declaraciones.

Rachel-Flore Pardo, abogada de la presunta víctima, recordó en un comunicado que «una imputación no es nunca automática» y que en este caso demuestra que el juez de instrucción considera que «hay indicios graves y concordantes de la comisión del crimen de violación de la que mi clienta ha sido víctima».

Hakimi, nacido y criado en España, formado en el Madrid, se encontraba entrenando con su equipo cuando salió la noticia de su imputación por violación. El Paris Saint-Germain expresó a través de un comunicado su apoyo al jugador y mostró su confianza en la justicia.

El pasado domingo una joven de 24 años acudió a la comisaría de Nogent-sur-Marne, a las afueras de París. La presunta víctima declaró que el internacional marroquí la había violado. Aunque la mujer no quiso presentar una denuncia formal contra Hakimi, la comisaría abrió una investigación.

Según el diario 'Le Parisien', la mujer y el futbolista se conocieron el pasado 16 de enero a través de Instagram y comenzaron a conversar. La presunta violación habría tenido lugar el sábado 25 de febrero, en víspera del clásico de la liga francesa entre el Olympique de Marsella y el PSG. Hakimi no había viajado a Marsella con el resto de su equipo porque estaba lesionado.

El jugador invitó a la presunta víctima a su domicilio en las afueras de París. La mujer se desplazó hasta allí en un Uber encargado por el futbolista. Su esposa, la actriz Hiba Abouk, y sus dos hijos, no estaban en casa ese día. Según contó la presunta víctima, el futbolista la habría besado en la boca y en los pechos y le introdujo los dedos en la vagina, a pesar de sus protestas. La mujer logró finalmente deshacerse de su agresor de una patada. Una vez libre, envió un SMS a una amiga, que la fue a buscar a la casa de Hakimi.