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Los clubes de fútbol de otras comunidades autónomas podrán aumentar el público en sus estadios durante este mes de septiembre. La flexibilización de las restricciones sanitarias motivadas por el covid se debe a que el Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas acordaron este miércoles ... dentro del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), ampliar los aforos máximos en los estadios de fútbol al 60% y en baloncesto al 40%, al tratarse de recintos cerrados. Esta nueva medida estará en vigor para los partidos que se celebren este mes.
La decisión tomada este miércoles en el CISNS supone el doble de los aforos establecidos en Euskadi para espectáculos deportivos. El Comité Asesor del Plan de Protección Civil de Euskadi (LABI), el órgano que decide las restricciones a aplicar en la Comunidad Autónoma Vasca, anunció el pasado lunes que, en recintos con capacidad superior a 5.000 personas, el aforo máximo no podrá superar el 30%. Asimismo, el LABI indicó que en recintos con capacidad de entre 1.600 y 5.000 personas el máximo en interiores será de 800 personas y de 1.200 en exteriores. Estas medidas adoptadas en Euskadi permitirán que a San Mamés puedan entrar casi 16.000 aficionados. Concretamente, 15.986 personas podrán presenciar en La Catedral el encuentro que se disputará el 11 de septiembre entre el Athletic y el Mallorca.
En cambio, y después de elevar el CISNS los aforos máximos hasta el 60%, la afluencia a San Mamés se quedará muy por debajo de otros grandes campos de Primera División. El Camp Nou, el Santiago Bernabéu y el Ramón Sánchez Pizjuán podrían albergar en las próximas jornadas aforos ya significativos, de 60.000, 48.000 y 26.000 espectadores, respectivamente. Athletic, Real Sociedad, Alavés, Amorebieta y Eibar se mantienen como los equipos profesionales de España, junto a los catalanes, con menos público. En el resto de los campos de la Liga se ha permitido un 40% hasta ahora, y hasta un 60% con las medidas apoyadas ayer por el CISNS.
El Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas no han levantado el veto al acceso de aficionados a los entrenamientos de sus equipos, que tendrán que desarrollarse preferiblemente sin público. El CISNS también decidió ayer que se mantendrá el uso de la controladora de los espacios comunes, que estará sujeta al control del personal del evento deportivo.
Las entidades organizadoras de los encuentros deportivos también garantizarán el personal suficiente de seguridad a fin de evitar aglomeraciones. Para ello, se fijarán franjas horarias para el acceso escalonado del público por zonas y sectores, comenzando por aquellos más alejados de la salida. Para la salida, el procedimiento será inverso.
Esta flexibilización de los aforos llega después de que el pasado 4 de agosto, tras el parón estival, se anunciara la vuelta del público a los estadios con un aforo máximo del 40% en los estadios de fútbol para los partidos que se disputaran durante el mes de agosto y del 30% en las canchas de baloncesto.
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