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El circuito de diez kilómetros que este domingo recorre los lugares más emblemáticos de la ciudad es llano, muy rápido, sin apenas giros cerrados que impidan a profesionales y aficionados lograr grandes marcas, pero eso no quiere decir que no tenga puntos clave, que aquí desgranamos junto a Carolina Robles, una de las candidatas a llevarse el título de campeona de España que se dirime en la prueba bilbaína.
Salida y meta
El corazón del 10K es el Arenal, escenario de la salida y la llegada y donde se realizarán todas las pruebas anteriores correspondientes a las categorías inferiores. Y allí, a las 12 horas, arrancará la primera edición de la carrera. el pelotón, con los atletas del Campeonato de España al frente, tomará la salida en el paseo del Arenal, dejando a la izquierda el parque. Una vez superada la rotonda del Ayuntamiento, se afrontar una larga recta a través del Campo Volantín donde los corredores tomarán posiciones y buscarán su ritmo de competición. Habrá que ver si la meteorología acompaña el domingo, porque es una zona muy expuesta al viento, que puede pegar en contra y desgastar a los corredores.
Primer gran giro
Tras el paso por la Universidad de Deusto el pelotón de aspirantes a la victoria ya habrá tomado las posiciones de vanguardia. Desde allí se realizará el primer giro de la carrera. Será en Botica Vieja, para después ascender la única cuesta, por la calle Francesc Maciá, hasta el puente de Deusto. Apenas son 200 metros sin gran desnivel, pero en una carrera tan llana, cualquier mínimo cambio de ritmo hace daño en las piernas, que ya acumularán cerca de cuatro kilómetros en ese punto.
Carrera lanzada
La carrera estará lanzada por la Plaza de Euskadi, Elcano, Moyua y Gran Vía hasta el segundo giro cerrado de la prueba, situado en las inmediaciones de El Corte Inglés. Un respiro para volver a recuperar el ritmo de crucero. De nuevo los atletas afrontarán una larga recta por la Gran Vía hasta el Sagrado Corazón, para entrar en el Parque de Doña Casilda y pasar junto al Museo de Bellas Artes. De ahí los atletas pasarán junto al Euskalduna para tomar el camino de vuelta hacia la meta junto a la ría.
Paso icónico
El paso por el Museo Guggenheim será otro punto fuerte del recorrido. Allí las cosas tienen que estar bastante claras, porque nos acercamos al kilómetro nueve de la carrera, que está en el inicio de Uribitarte. De nuevo nos encontramos con el peligro del viento si sale un día de viento sur en Bilbao.
Último esfuerzo
Tras pasar junto al Zubi-Zuri, queda el último esfuerzo. Hay que acceder al puente del Ayuntamiento y tras pasarlo, girar a la derecha para regresar al Arenal. Allí espera la meta y también grandes marcas, porque el de Bilbao es un circuito rapidísimo donde si el tiempo acompaña los participantes pueden volar.
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