Opinión
Ya está el Tour encima y lo que me viene a la cabeza es el recuerdo de mi debut en la carrera, en 1997 en las filas del Gewiss. Sobre todo recuerdo una anécdota con mi compañero Nicola Minali, el sprinter del equipo. Me cogió ... y me dijo, 'mira, Jon. Esto es el Tour. Olvídate de las demás carreras, vas a conocer otro ciclismo. C'est le Tour'. No era un cualquiera Minali, en aquella edición ganó dos etapas. Cuando llegábamos agotados al hotel tras las jornadas más duras, siempre me recordaba: 'Odrio, c'est le Tour'. El último día, en París, después de haber trabajado mucho para ayudarle a lo largo de la carrera, volvió a ganar y se reía, recordándome que aquello era el Tour. Se me quedó grabada la enseñanza.
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Estamos ante una edición atípica porque acaba en Niza y sobre todo porque termina con una crono que puede ser decisiva. Hace tres años Vingegaard dio un golpe encima de la mesa cuando fue el único que dejó a Pogacar, en en Mont Ventoux. Entones ya le vi como el más fuerte y lo demostró los dos años siguientes. Psicológicamente, le ha ganado la batalla y por eso Pogacar ha ido al Giro, para asegurarse de ganar una grande, porque Vingegaard es su único rival.
Si todo el guion hubiera sido normal, Vingegaard sería más favorito que Pogacar, pero ahora estamos en la incertidumbre porque es muy difícil que el danés esté al cien por cien. Yo me mojo siempre, pero en esta situación no podremos saber cuál es la realidad hasta que le veamos en carrera. Una cosa es que sean unos fenómenos y otra es que haya podido alcanzar su tope. No es fácil, y necesitará el cien por cien para bator a Pogacar. Estar al 80% no le basta.
Roglic es el eterno ganador que parece que no va a ganar nunca, pero es un gran corredor. Está muy cerca, pero un escalón por debajo. Tener a Hindley y Vlasov en el equipo le daría variantes, pero en el Bora son alemanes, cuadriculados, y juegan como si tuvieran a Pogacar. Tengo claro que este Tour va a ser para Evenepoel un antes y un después. Se recuperó bien de la caída de la Itzulia y ha tenido tiempo para llegar a tope. Vamos a ver su madurez deportiva de verdad. A ver si es capaz de superar su irregularidad y su falta de seguridad. Su Vuelta a España la ganó por la caída de Roglic, que es su punto débil. Se cae mucho.
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¿Los nuestros? Pello Bilbao lo hará bien y va estar con el grupo de aspirantes al top 10 que forman Carlos Rodríguez -al que veo maduro para pelear por el podio-, Jorgenson dependiendo de Vingegaard, Carapaz, Gall o Simon Yates. Veo a Alex Aranburu y a Oier Lazkano con muchas opciones. Creo más que nunca en ellos. Con un punto de madurez, están ante una muy buena oportunidad. Les toca.
Empezando por esta primera etapa de hoy, donde el primer maillot amarillo puede ser para Roglic, Pogacar o Evenepoel. El máximo favorito sería Van Aert, si está bien. Es difícil para los sprinters, aunque Pedersen podría pasar. Ahí deben aparecer los Bettiol, Aranburu, Pidcock, Healy, Van Gils...
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Ya está aquí. Lo decía Minali: 'Hai capito, Odrio? C'est le Tour'. No se me ha olvidado.
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