Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
«El sueño es recuperar lo que fue el Euskaltel-Euskadi», proclama Mikel Landa, presidente de la Fundación Euskadi en la presentación en sociedad de la plantilla de 20 ciclistas que en 2020 devolverán el maillot naranja a la élite del ciclismo mundial. «Queremos ... estar en la Itzulia, donde tenemos que dar la talla ante nuestra afición, y aspiramos a ser invitados por la Vuelta a España», asegura el corredor de Murgia. Mientras su carrera deportiva rodará con el equipo Bahrain en busca del podio del Tour, Landa acuna su proyecto sentimental, la Fundación que le vio crecer. La próxima temporada da el salto a la segunda división, a la categoría UCI Pro Team. Ya está más cerca de donde estuvo el Euskaltel.
«Es un proyecto sólido que tiene asegurados los próximos cuatro o cinco años», apunta Jesús Ezkurdia, el encargado de que todo funcione. La escuadra debutará en enero en el Tour de San Juan (Argentina) y ya tiene un calendario nacional e internacional de primer nivel. En la presentación de la plantilla se han mostrado imágenes de los triunfos naranjas de Laiseka, Nieve, Antón... Viene una nueva camada apadrinada por Mikel Landa, que, ya puestos a soñar, sueña con volver a vestirse de naranja en el Tour de Francia de 2023, que tiene muchas opciones de salir desde Bilbao. «Ojalá podamos estar en ese Tour con este equipo», dice en alto en un salón del hotel Meliá, en la capital vizcaína, ante los corredores del nuevo Euskadi. Ese apoyo de las instituciones al ciclismo, con inversiones en la Vuelta y el Tour, puede ser clave para el crecimiento de la escuadra.
La historia continúa. En 1994, Miguel Madariaga se echó al hombro un equipo hecho a todo correr, con retazos y un par de furgonetas. Se jugó hasta el patrimonio por sostenerlo. Aquel conjunto Euskadi estuvo varias veces a punto de desaparecer. Aguantó. Y llegaron las victorias de Roberto Laiseka en la Vuelta y el Tour. La formación naranja, basada en la cantera vasca, se convirtió en una bandera. El ciclismo de Euskadi tuvo en ese maillot a su gran embajador. Servía, además, para dar salida al talento de los jóvenes. De ahí salió, por ejemplo, Mikel Landa.
En 2013, el Euskaltel se apagó. Madariaga mantuvo a flote la Fundación Euskadi hasta que ya no pudo más. Y entonces Landa, hijo deportivo de la entidad, acudió al rescate. Asumió la presidencia y con el apoyo de firmas como Orbea y Etxeondo se fijó como meta devolver el color naranja a lugar donde estuvo, a las mejores carreras del mundo. El proceso es lento. Primero, el equipo ha estado en tercera división. En 2020 dará el primer gran salto, a segunda. Podrá así competir como invitado en pruebas del UCI World Tour como la Itzulia. Es como regresar a casa.
El Euskadi acaba de presentar en Bilbao su plantilla. Conserva a los diez jóvenes corredores que han disputado esta campaña y ha fichado a otra decena de dorsales para dar el salto de calidad que requiere su nuevo estatus. Entre ellos destaca Rubén Férnandez, murciano formado en equipos vascos y vencedor del Tour del Porvenir. Los últimos en llegar han sido el valenciano Joan Bou, que viene del Nippo italiano, y el cántabro Antonio, el 'Chava', Angulo, procedente del Efapel portugués.
Mantiene su lema de siempre: «Dar la oportunidad de competir en el campo profesional al mayor número posible de corredores formados en la cantera vasca». En 2020 seguirán uniformados de naranja Ibai Azurmendi, Gotzon Martín, Txomin Juaristi, Antonio Soto, Diego López, Dzmytri Zhygunov, Jokin Aranburu, Mikel Alonso, Peio Goikoetxea y Unai Cuadrado.
El conjunto vasco ha contratado a otros diez corredores, fundamentales para afrontar un calendario de primer nivel. Junto a Rubén Fernández, que fue líder de la Vuelta a España en 2016, llega Juanjo Lobato, antiguo corredor del Euskaltel-Euskadi. El resto del núcleo lo formarán cinco ciclistas del desaparecido Murias: Mikel Iturria, vencedor en Urdax en la pasada Vuelta, más Julen Irizar, Mikel Aristi, Gari Bravo y Mikel Bizkarra. Las tres plazas restantes son para Iker Ballarín (del Laboral Kutxa, filial), Joan Bou y Antonio Angulo. «Tenemos un equipo muy compacto. Estoy convendido de que vamos a dar el nivel», apuesta su director, Jorge Azanza. Primero en la Itzulia, pronto en la Vuelta y algún día en el Tour. La marea naranja vuelve.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.