Cuando Remco Evenepoel nació, en enero de 2000, Óscar Sevilla tenía ya 23 años, había disputado dos ediciones de la Vuelta a España y en su palmarés lucía un triunfo de etapa en el Tour de Romandía. En la tercera jornada de la Vuelta ... a San Juan (Argentina) que se disputa esta semana, Evenepoel, con 20 años recién cumplidos, ha arrasado en contrarreloj de 15,2 kilómetros, con 32 segundos de ventaja sobre el italiano Filippo Ganna y 1 minuto y 8 segundos sobre el tercer clasificado, el manchego Sevilla, de 43 años.
Publicidad
El joven belga, que carga con el sambenito de ser el 'nuevo Eddy Merckx' es una sorpresa diaria. Hasta hace cuatro años era futbolista, convocado por la selección belga juvenil. En cuanto le mandaron al banquillo archivó el fútbol y probó con el ciclismo. Zas. Sin pausa fue campeón del mundo juvenil y, sin pasar por el campo amateur, debutó la temporada pasada en el circuito profesional con el Deceuninck, la escuadra de Alaphilippe. De nuevo, zas. Ganó la Clásica de San Sebastián y el Campeonato de Europa de contrarreloj. No parece tener límites. «No soy Merckx. No podré igualarle. El ciclismo de entonces y el de ahora no tienen nada que ver», repite. Pero sus triunfos, tan tempranos, alimentan el mito y las expectativas.
La contrarreloj de San Juan, de 15 kilómetros entre Ullum y el Dique Punta Negra, se disputó con bicicletas convencionales. Trasladar desde Europa las 'cabras' hubiera sido un engorro. Eso benefició a Evenepoel, de talla baja, ante un tallo como el italiano Ganna. Sin las bicis de 'crono', tan aerodinámicas, primaba más la fuerza. Evenepoel. «Era un recorrido corto, pero me pareció la más larga de mi vida, con tanta recta. Fui a por la victoria y conseguirla me hace feliz. Gané tiempo en el llano y también en la subida final, donde aceleré. Eso significa que tenía buenas piernas», contó el belga, nuevo líder de la ronda argentina.
«Es mi primera contrarreloj del año y mi primera victoria con el maillot de campeón de Europa. Pero no pienso en la clasificación general. Voy día a día», aseguró. Cada amanecer se sorprende con su progresión. No sabe dónde está su techo. Nadie lo sabe. Eddy Merckx nació con un talento físico excepcional, pero lo que le distinguió fue su ambición, su pasión por este deporte. Simplemente, salía a a ganar cada carrera. Todas. Y si en una vuelta iba por detrás, retorcía hasta su alma para remontar. El tiempo dirá si Evenepoel alcanza el nivel físico del 'Caníbal'; lo que sí parece es que comparten ese hambre de victoria.
Tras Evenepoel, Ganna y Sevilla se clasificaron Oliveira y McNulty. El vizcaíno Íñigo Elosegui (Movistar) terminó en el puesto 29, a dos minutos del belga. Peio Goikoetxea fue el primero del equipo Euskadi, en la plaza 53 a 2.48, lejos de Evenepoel y también del eterno Sevilla, aquel ciclista con rostro infantil que enamoró a la afición en el inicio de este siglo y que ahora, nacionalizado colombiano, es compañero de entrenamientos de Egan Bernal, último vencedor del Tour, y sigue al nivel de los mejores. Como si su cuerpo no tuviera límite. Nadie sabe lo alto que podrá llegar Evenepoel y nadie imaginaba que Sevilla llegara tan lejos.
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.