Cuando el Circuito de Getxo fue de los hermanos Morales

Los ciclistas que el domingo pelearán por el triunfo en la cuesta de Txomintxu y el muro de Arkotxa pisarán el camino que vio triunfar a los Morales. También entonces los aficionados copaban las orillas de la carretera. Eran los años de Bahamontes y Loroño, de Anquetil y Poulidor. Y de los Morales. Ocho hermanos. De Balmaseda y luego afincados en Castro Urdiales, donde tienen dedicada una calle. Carmelo ya era pastor con 8 años en Espinosa de los Monteros. Con 11 se dedicó al negocio familiar, a repartir pescado en bicicleta por el valle de Mena. Así aprendieron a ser ciclistas en su casa.

Carmelo desbrozó la senda. A su manera en aquellos tiempos de pobreza y estraperlo. Cuentan que un día que iba a escondidas por el monte con su mercancía le dio el alto la Guardia Civil. El chaval salió pitando, saltando cercas. «¿Le has visto? ¿Le has conocido?», preguntó un agente al otro. «No, brincaba como un jabalí». Luego supieron que era uno de los Morales, Carmelo. Se quedó para siempre con ese apodo. Años después, cuando se hizo famoso como uno de los grandes gregarios del Tour, recibía cartas en las que no ponía su nombre, sino el dibujo de un jabalí. Con eso bastaba para que el cartero supiera el buzón al que acudir.

Carmelo, que llegó a ser líder de la Vuelta a España, no ganó el Circuito de Getxo. De eso se encargaron dos de sus hermanos. Abrió la cuenta Jesús cuando apenas tenía 20 años. En 1950 superó en Arriluze a dos figuras como Martín Mancisidor y Jesús Loroño. En el palmarés de Jesús Morales figuran también el Gran Premio de Llodio, el de Bermeo, el Liberación de Bilbao, el Vizcaya... tantas carreras desaparecidas. El Circuito de Getxo, organizado por la Sociedad Ciclista Punta Galea y patrocinado por EL CORREO, sigue en pie.

Roberto Morales se impuso en dos ediciones. En la primera, en 1959, tuvo la ayuda de Carmelo. «El sprint para Roberto», se repetía mientras le preparaba a su hermano la llegada ante rivales de la talla del cántabro Menéndez y el vizcaíno Antón Barrutia. Y Roberto repitió en 1962 frente a dos estrellas como José Pérez Francés y José Antonio Momeñe, tercero y cuarto del Tour, respectivamente. En aquel mes de julio, como recuerda el libro 'Historia del Circuito de Getxo', Roberto Morales ganó 70.000 pesetas en premios. Un dineral.

En la lista de oro de ganadores de esta clásica vizcaína, junto a dos de los hermanos Morales aparecen figuras como Francisco Cepeda, Federico Ezquerra, Julián Berrendero, Jesús Loroño, los hermanos Barrutia, Marino Lejarreta, Fede Etxabe, Adrie van der Poel... y el joven Juan Ayuso, vencedor en 2022. El nombre del próximo domingo está por escribir.