La primera Federación Alavesa
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Ante la incipiente actividad baloncestística y el éxito del Torneo de Primavera, la Delegación Nacional de Deportes decidió en 1950 la concesión de una 'embajada' federativa a la provinciaLa Delegación Nacional de Deportes decidió en su última reunión de 1950 la concesión de una Federación de Baloncesto a la provincia de Álava. Así, por sorpresa. La incipiente actividad baloncestista y el éxito del primer Torneo de Primavera resultaron razones suficientes para la creación de una 'embajada' federativa. De esta forma, el 15 de Diciembre de 1950, Cecilio Fernández de Retana, delegado del Frente de Juventudes, presidía sin comerlo ni beberlo la primera Federación Alavesa de Baloncesto.
Con el nombramiento, la nueva institución se mostró emprendedora. Se puso a organizar el torneo internacional del cantábrico que enfrentaría a una selección alavesa contra equipos franceses procedentes de San Juan de Luz, Biarritz, Hendaya y Bayona. Agua de borrajas. No había presupuesto ni capacidad organizativa. Se trazó un plan B que consistía en traer al Frontón Vitoriano a la Real Sociedad de baloncesto. Tampoco. La tercera opción, el mismo choque pero frente al Arlanza de Burgos, también fracasó. La serie de contratiempos lastraron de tal manera el entusiasmo de los responsables federativos que se limitaron a poner en marcha la segunda edición del Torneo Primavera.
Las calamidades se multiplicaron. El Frente de Juventudes no se inscribió. Las fechas que se barajaban para el torneo coincidían con los campeonatos nacionales del FJ que eran inexcusables. Además, el campeón vigente, Marianistas, tampoco participó. Los colegiales querían centrar sus esfuerzos en preparar y jugar el Torneo Marianista (ahora Olimpiada Marianista) que iba a tener lugar en Vitoria frente a los colegios de Valencia, Madrid y San Sebastián. Las renuncias no quedaron aquí. Los regimientos de Artillería, 25 y 46, también dieron un paso atrás. Por fortuna, Andrés Antonio Varela, que iniciaba su carrera militar, acudió otra vez al rescate y pudo convencer a las autoridades militares de salir con un equipo que se denominó Centro de Estudios Militares. No todo fueron deserciones. Tres equipos acabaron completando la competición. Flandes, el ejército de infantería, inició su importante participación en el baloncesto alavés. El Instituto Fray Francisco de Vitoria se apuntó con los hermanos Elejalde en el equipo amarillo y San José dobló su participación. Aunque tarde, el campeonato arrancó el 12 de abril. Las reglas determinaban que a finales de marzo se debían conocer los campeones provinciales que competirían por el entorchado nacional. San José que se se hizo con el II Trofeo Primavera no pudo disputar el Campeonato de España. Por su parte, Marianistas quedó último en su torneo y el Frente de Juventudes resultó eliminado a las primeras de cambio.
El panorama alavés resultaba desalentador en 1952. No hubo competición, los equipos se dedicaron a sus propios campeonatos, no se compitió fuera del territorio alavés y nadie aparecía al volante. Los jugadores, hartos del inmovilismo obligaron a Retana a hacerse a un lado y propusieron al capitán de la Policía Armada, Cipriano Pérez Trincado, para liderar la Federación. En sus memorias escribe: «La selección del presidente fue propuesta entre Cipriano Pérez Trincado, Martín Municio y José María Mongelos, los más viejos, los que acudíamos a presenciar los partidos de baloncesto». En septiembre Trincado ya estaba al frente de la comisión interina y el 11 de noviembre de 1952 fue nombrado presidente. La nueva junta supuso un enorme soplo de aire fresco: creó un colegio de árbitros con Sáenz de Ibarra, Cástor Mancilla y Federico Arocena, el fotógrafo de Arqué. Se planificó la creación de una liga femenina, un calendario que permitiera acudir a los nacionales y consiguió el patrocinio de las empresas de Sanchiz Bueno para solventar el alquiler del frontón Vitoriano.
Nació el I Campeonato Provincial con cinco equipos. El Deportivo Alavés era el equipo del Frente de Juventudes. El Infantes, el conjunto del ejército de Flandes. El Sphaira, donde Xabier Añua junto a Vicente Elejalde completó su iniciación en el mundo de la canasta. Y también nacieron al baloncesto, en este 1953, los dos equipos con más tradición de la historia del baloncesto alavés: Vasconia y Vitoria. Una magnífica pelea en la punta del iceberg. Pero esto es otra historia…
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Mikel Labastida y Leticia Aróstegui (diseño)
Óscar Beltrán de Otálora y Gonzalo de las Heras
José A. González y Álex Sánchez
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