¿Qué pasó en los doce minutos que esperó la ACB hasta suspender el Surne-Breogán?

Este es el relato de los hechos acontencidos hasta la cancelación del Surne-Breogán.

- El cronómetro de 24 segundos, que marca la posesión de cada equipo y cuya avería motivó la suspensión del partido ayer en Miribilla entre el Bilbao Basket y el Breogán, funcionaba durante las pruebas que se realizan antes de cada partido para comprobar el estado de los aparatos electrónicos. Sin embargo, este reloj falló una hora antes del inicio oficial del encuentro, programado a las 20.00 horas. Con el fin de sustituir el dispositivo dañado, se utilizó uno que el club tienen como repuesto, que tampoco pudo ponerse en marcha.

- El club bilbaíno planteó entonces la posibilidad de instalar en Miribilla un cronómetro que se encontraba en La Casilla, pero esta opción no pudo llevarse a cabo porque antes la ACB había decidido la suspensión del partido sólo doce minutos después de la hora en la que debía haber comenzado. Tampoco fue posible jugar con un reloj de suelo, al parecer, por la negativa del Breogán y porque ese dispositivo impide el 'instant replay'. Algunos aficionados del club lucense reprocharon a la directiva del Breogán que se negase a jugar el partido. Sin embargo, en su web oficial, el club dice sentirse «perjudicado» por la suspensión, que afirma que se tomó «unilateralmente», sin que se consultase su postura, y que es la ACB la única entidad con «potestad para tomar una decisión de este calibre»..

Al parecer, la ACB pidió a los clubes que se pusieran de acuerdo y decidieran disputar el duelo con los elementos técnicos que se propusieron como alternativa al reloj averiado, o aplazarlo. El conjuntto gallegó, sin embargo, presionó para que fuera la ACB la responsable de la decisión final.

A raíz de la polémica por la suspensión del encuentro se ha sabido que Bilbao Ekintza, la agencia de desarrollo local del Ayuntamiento de Bilbao, ha tramitado hace casi dos meses la compra de un nuevo sistema de marcadores. Sin embargo, los problemas de suministros de material motivados principalmente por la situación de pandemia están retrasando su llegada. Incluso se ha pedido la mediación de la ACB para acelerar la operación.