Las atletas transgénero no podrán competir en pruebas femeninas internacionales

Eso sí, no se trata de una medida permanente, sino revisable. Es decir, la federación internacional creará «un grupo de trabajo para seguir investigando las directrices de elegibilidad de los transexuales». «No vamos a decir que no para siempre», afirmó Coe. Este grupo incidirá durante un año sobre la posible inclusión de los atletas transgénero en competiciones internacionales antes de ofrecer de nuevo sus conclusiones, tal y como sucedió ayer.

Sebastian Coe explicó que «las decisiones siempre son difíciles cuando involucran necesidades y derechos en conflicto entre diferentes grupos, pero seguimos opinando que debemos mantener la equidad para las atletas femeninas por encima de todas las demás consideraciones».

En este sentido, la World Athletics ha preferido anunciar la norma antes de que se den casos como los que sucedieron con la haltera Laurel Hubbard, que compitió en los Juegos de Tokio'20 en la categoría femenina y la nadadora Lia Thomas, que ha causado un gran debate en la FINA (Federación Internacional de Natación) tras sus actuaciones en las competiciones universitarias de Estados Unidos. «Actualmente no hay atletas transgénero compitiendo internacionalmente en atletismo y, en consecuencia, no hay evidencia específica del impacto que estos atletas tendrían en la equidad de la competencia femenina en nuestro deporte», aclaró el organismo mundial.

Aun así, se ha preferido profundizar en una cuestión cada vez más presente en el deporte y donde el atletismo no quiere mirar hacia otro lado, y menos tras la complicada experiencia mantenida con los casos de las atletas hiperandróginas como Caster Semenya. La normativa al respecto es tajante y veta a las atletas cuya tasa de testosterona supere los parámetros, salvo que decidan medicarse para rebajar el nivel a los límites establecidos o competir en pruebas de velocidad o fondo.

De todos modos, Coe aseguró que «nos guiaremos por la ciencia en torno al rendimiento físico y la ventaja masculina que inevitablemente se desarrollará en los próximos años. A medida que haya más evidencia disponible, revisaremos nuestra posición, pero creemos que la integridad de la categoría femenina en el atletismo es primordial».