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laura gonzález
Jueves, 5 de noviembre 2020
Hace tres semanas que el Leioa Waterpolo debía de haberse estrenado en la máxima categoría nacional femenina, la División de Honor, después de haber sido el primer conjunto vasco en lograrlo, pero lo cierto es que las vizcaínas aún no saben lo que es eso, jugar en la elite. Este fin de semana iban por fin a firmar su histórico debut, enfrentándose al Sant Feliu y al CE Mediterrani en Cataluña, pero de nuevo el coronavirus se ha cruzado en su camino.
El área de waterpolo de la Federación Española de Natación le comunicó al club de la margen derecha que sus dos encuentros previstos para este domingo, seguidos y sin descanso, no iban a poder disputarse en la fecha fijada «por incidencias Covid-19» en las escuadras rivales. El que correspondía a esta tercera jornada era el del Sant Feliu, mientras que el del Mediterrani debía de haberse celebrado una semana antes, el pasado 24 de octubre. Un positivo en el vestuario del Leioa les obligó a todas a quedarse en casa siguiendo el protocolo pertinente, sin poder tampoco recuperar ese fin de semana el partido aplazado frente al Sabadell, el primero que aparecía en el calendario, y que había sido pospuesto para evitar tantos desplazamientos seguidos a tierras catalanas en un contexto de pandemia, entre otras razones.
El caso es que por una cosa o por otra, el debut del Leioa se resiste. Si no hay ningún otro tipo de contratiempo, ese ansiado estreno llegará el próximo sábado 14 de noviembre en casa del CN Catalunya, conjunto que tampoco jugará este fin de semana ya que debía de medirse al Mediterrani, el que al igual que las leioztarras tenía previsto hacer 'doblete' para aprovechar la presencia de las vascas en su territorio. El sábado 28 de noviembre, a las 16.45 horas, es cuando, si todo va según lo previsto, las dirigidas por Jon López disputarán su primer partido en su piscina, en Askartza, ante las madrileñas del Boadilla.
Pero lo cierto es que, dada la situación, todo está en el aire. Debido a la incertidumbre reinante en este y otros deportes por el incremento de positivos por coronavirus en los clubes y en la sociedad en general, y debido al cierre de algunas instalaciones y a las restricciones para entrenar, las entidades pertenecientes a la máxima categoría nacional femenina se reunieron con el área de waterpolo de la federación española para determinar si la competición seguía adelante o se paralizaba. Pese a una gran disparidad de opiniones, optaron por seguir con la liga, emplazándose para futuras reuniones y comprometiéndose a hacer un seguimiento de las diferentes incidencias que pudieran ir surgiendo en los distintos clubes y que les impidieran seguir ejercitándose con cierta normalidad.
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