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laura gonzález
Lunes, 20 de julio 2020, 23:39
Hace un mes el Club Voleibol Sestao, el único representante vasco en las dos primeras categorías nacionales, se planteaba seriamente su renuncia a la Superliga 2. Esto venía dado por un panorama económico nada alentador, en el que debido a la falta ... de apoyos, el club vizcaíno no podía confirmar el poder contar con unas mínimas garantías posibles para afrontar la competición.
Un mensaje casi de socorro que, como la propia entidad ha asegurado, ha sido bien recibido por las instituciones, lo que le ha permitido formalizar su inscripción dentro de los plazos previstos, por lo que sumarán su tercera temporada consecutiva en la segunda división. Unos apoyos que les han asegurado la búsqueda de nuevas fórmulas, más allá de las aportaciones puntuales, que permitan afianzar de forma sólida las bases para conformar un proyecto en el que se mantenga la filosofía de cantera por encima de todo, y en el que ir contando poco a poco con más respaldo social.
«Era importante que el club no se sintiera solo y en ese sentido estamos satisfechos de cómo han ido estas semanas. Es lo que buscábamos. El mundo del vóley nos ha hecho llegar su preocupación y hemos recibido gestos de solidaridad de varios clubes que valoramos y agradecemos. También detectamos ganas de colaborar y sensibilidad por parte de las instituciones y creemos que hay una buena sintonía para tratar de encontrar fórmulas que nos permitan desarrollarnos a medio-largo plazo», explica César Ruiz, presidente del conjunto sestaorra.
Conversaciones y acuerdos que invitan al optimismo pero que sobre el papel, y principalmente en las arcas, aún no se han plasmado en unos ingresos que cubran el presupuesto mínimo de la temporada. Por ello, el CV Sestao asegura que se encuentra explotando «otras vías», y ha activado además «un plan de contactos con empresas de Bizkaia», para encontrar un patrocinador que le permita dar un salto de calidad y poder pelear por objetivos más ambiciosos.
Una ardua tarea en estos tiempos en los que el coronavirus ha tocado de lleno la economía de grandes, medianas y pequeñas empresas, lo que ha condenado al máximo representante del voleibol nacional en los últimos años, el Logroño, a desmantelar a su primer equipo, ganador de la gran mayoría de los títulos en la última década y vigente campeón de liga.
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