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Serena Williams reconoce sentir «una gran ansiedad» por el coronavirus

La tenista confiesa estar «un poco al límite» por la dura situación sanitaria mundial, tratando de mantener sana a su pequeña hija

Sábado, 21 de marzo 2020, 22:33

La tenista estadounidense confiesa estar viviendo con mucho temor la fatal propagación del coronavirus por todo el mundo. La ganadora de 23 títulos individuales en torneos de Grand Slam, reveló a través de sus perfiles en redes sociales que hace más de una semana ... se propuso pasar mes y medio alejada de todo el mundo en su casa, tratando de no mantener contacto con nadie más allá de su pequeña hija Alexis Olympia Ohanian, nacida hace tres años.

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Un distanciamiento social que no era obligatorio en Estados Unidos, como sucede en España desde el pasado sábado en el que se decretó el estado de alarma sanitaria, pero que la tenista ha decidido llevar a cabo para alejar de todo peligro a su familia. Una decisión personal que sin embargo le está produciendo muchos quebraderos de cabeza ya que el alejarse del resto y el ver cómo el virus no para de propagarse por el planeta, causando más de 10.000 fallecidos, le está generando «una gran ansiedad».

Con el circuito profesional femenino totalmente parado hasta el 7 de junio, su cabeza solo está en el Covid-19. «Al principio yo pensaba que esto realmente no podría afectarme, que no llegaría tan cerca de mi entorno. Luego, de repente, Indian Wells fue cancelado y me lo tomé bien, aunque era algo extraño, pero así podía tener un poco de tiempo libre y lo podría disfrutar». Una vez que se fueron aplazando más torneos Serena empezó a darle muchas más vueltas. Y ahí la angustia y el desasosiego empezó a apoderarse de ella. «He estado alejándome socialmente de todos durante mucho tiempo y cada pequeña cosa me vuelve loca. Estoy un poco al límite«, reconoce.

Tos de su hija

Una ansiedad que llega hasta tal punto que la propia tenista confiesa que se pone muy nerviosa cada vez que escucha a alguien estornudar o toser. «Y cuando digo alguien me refiero a mi propia hija. Una vez tosió y me enfadé mucho, la miré de reojo y le dije 'Serena está enojada'. Luego me puse triste por habérselo dicho. Me vuelvo un poco loca. Me pregunto todo el rato si ella está bien, si puede llegar a estar enferma. ¿Hay algo que pueda hacer? Simplemente no lo sé, así que en lugar de estar relajada e intentar disfrutar de esta temporada sin competir y tantos entrenamientos estoy realmente bajo un montón de estrés«.

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