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Su primera pasión fue el ballet, pero una ligera escoliosis le permitió adentrarse en el mundo del triatlón. La deportista pacense Miriam Casillas se prepara para repetir su segunda experiencia olímpica tras haberse clasificado para los Juegos Olímpicos de Tokio 2021, un logro ... todavía más dulce después de los contratiempos que ha sufrido en los últimos años. Su clasificación llega tras una larga temporada sin poder correr, y es que durante más de un año no pudo retomarlo tras someterse a una cirugía en el pie izquierdo.
Casillas, de 28 años, no es de las que tira la toalla. En apenas una semana de 2016, esta campeona terminó la carrera de Medicina y se clasificó para los Juegos de Río de Janeiro. Y es que el deporte siempre ha estado muy presente en la vida de Casillas, quien comenzó a practicar el ballet clásico a los tres años. No se introdujo en el triatlón hasta los 11, cuando se padre le propuso nadar para mejorar sus problemas de espalda. Así fue como Miriam y su hermano mayor se apuntaron al club de triatlón de Badajoz para correr y andar en bicicleta al aire libre. La deportista asegura que el ballet le dio la disciplina que desde entonces aplica en sus entrenamientos y para alcanzar sus marcas en el triatlón.
Hace diez años, a los 18, la joven se trasladó a Madrid para comenzar sus estudios universitarios y entrenar en el Centro de Alto Rendimiento, lo que hizo que el triatlón adquiriera un mayor peso en su vida. La clasificación para Río de Janeiro fue algo que llegó en un momento distinto de su vida, cuando aún era «más novata», según ella misma ha afirmado. Cinco años después y tras haber superado un quiste, una caída y algunos problemas más, se siente madura y preparada para dar lo mejor de sí en Tokio 2021.
Su referente femenino es la triatleta guipuzcoana Ainhoa Murua, con quien pudo competir y repetir una foto que se habían tomado juntas cuando ella tenía 12 años en los Juegos de Río. Médico de formación, Casillas admite que para ella ha sido difícil asistir a la pandemia de coronavirus sin ejercer como tal, pero espera que la Medicina esté más presente en su futuro. Hasta entonces, se esforzará por obtener los mejores resultados posibles en los Juegos que acogerá el país del sol naciente. Entre sus ilusiones se encuentra correr el relevo mixto, que se celebrará en los Juegos por primera vez. «Podemos aspirar a un diploma olímpico», apuesta.
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