Lindsey Vonn se planteó ser piloto de F1 pero lo rechazó por las cláusulas antiembarazo

Parecen dos deportes muy distintos, pero tanto el esquí como la Fórmula 1 requieren ser rápido, una buena dosis de estrategia y anticiparse a los acontecimientos. La esquiadora estadounidense Lindsey Vonn, quien el año pasado se retiró de las pistas y recibió el Premio Princesa de Asturias en su categoría de Deportes, ha confesado que valoró cambiar los esquís por un coche de carreras y convertirse en piloto de F1 profesional. Aunque nunca se ha dedicado a ello le atrae la velocidad y conoce de cerca el sector, pero una de las cuestiones determinantes al descartar esta salida fueron las cláusulas antiembarazo que las escuderías le pedían cumplir.

«Lo estuve pensando pero no di el paso porque me dijeron que debía comprometerme por tres años a no quedar embarazada», ha explicado en una entrevista en el programa de televisión 'En profundidad con Graham Basinger'. Referente del deporte femenino mundial, Vonn fue probadora en el Red Bull Ring de Spielberg en 2016, cuando pilotó un Fórmula Renault 2.0 y un Fórmula Renault 3.5. Este último coche alcanza los 290 kilómetros por hora. «En ambos deportes necesitas un 'timing' perfecto, saber cuándo darle al gas, frenar y cómo encontrar la mejor posición», mencionó Vonn, quien se considera una amante de la velocidad, en aquella ocasión.

Vonn tiene amigos automovilistas como Max Verstappen, de Red Bull Racing, o Lewis Hamilton, de Mercedes. También valoró una incursión en la Nascar. La exesquiadora de 35 años no tiene experiencia como piloto y no ha revelado con qué empresas de la F1 mantuvo conversaciones para iniciarse en esta competición. De no haber sido por la cláusula antiembarazo, Vonn podría haberse convertido en una de las pocas pilotos de F1 tal y como hiciera Lella Lombardi entre 1974 y 1976. La italiana, última mujer en estar presente en la parilla, sumó 17 grandes premios.

La exesquiadora es campeona olímpica y mundial y tiene en su haber cuatro títulos generales de la Copa del Mundo de esquí alpino. Sin embargo, destaca que los salarios de los pilotos F1 son muy elevados en comparación al modo de vida de los esquiadores. «El sueldo de un piloto equivale, probablemente, al presupuesto anual del esquí como deporte. Hamilton gana más que todos los esquiadores juntos», calcula Vonn, quien recibió el premio Princesa de Asturias tanto por sus logros deportivos como por ser todo un ejemplo de superación ante los numerosos accidentes que ha sufrido en su carrera. Es una de las seis mujeres que han ganado Copas del Mundo en las cinco disciplinas de esquí alpino.