El pasado 9 de junio se aprobó en el Consejo de Ministros el Proyecto de Ley Orgánica de Protección Integral a la Infancia y la Adolescencia frente a la Violencia. Una noticia que merece ser celebrada porque supone una herramienta efectiva para combatir un ... problema de extrema gravedad. La sociedad no puede mirar hacia otro lado y debe abordar la realidad, nunca mejor dicho, con todas las de la ley.
Publicidad
Y la realidad nos indica que miles de niños y niñas sufren diferentes formas de violencia que condicionan sus vidas y las lastran, a veces, de manera irreparable. Como no podía ser de otro modo, el Proyecto de Ley Orgánica alude al deporte y lo considera un ámbito al que prestar especial atención, ya que la práctica deportiva es inseparable de la infancia y de la adolescencia. El deporte no solo está ligado al ocio de la infancia, sino que también es un espacio educativo, donde adquirir valores y conocimientos personales y vitales.
Especialmente relevante es subrayar que el deporte en ningún caso puede convertirse en un escenario de discriminación por orientación sexual, identidad sexual o expresión de género. En este contexto, la formación de los entrenadores, los técnicos, los monitores y los voluntarios resulta primordial. Además de sus conocimientos teóricos y técnicos sobre el deporte en cuestión, los profesionales deben garantizar un entorno seguro para la infancia y la adolescencia. Y las federaciones, los clubes, las entidades públicas deben exigir esa preparación de su personal en cuestiones relacionadas con la prevención de la violencia, los derechos de la infancia, la convivencia, la diversidad y la educación afectivo emocional. Protocolos de actuación, en definitiva, que propicien el desarrollo integral de niños y niñas.
Tras la aprobación del Decreto, lo importe en adelante será pasar del dicho al hecho y poner en práctica el espíritu de la ley. No basta con la intención, sino que deben concretarse las acciones que protejan a nuestros menores. En el Athletic Club éramos plenamente conscientes de esta necesaria evolución y ya establecimos en su día el Programa Aterpe, centrado de manera específica en la protección. Y ahora, de manera pionera en el Estado, hemos creado un nuevo curso universitario, liderado por la UPV/EHU y la Fundación Athletic Club, que supone un buen ejemplo de colaboración interinstitucional e interdisciplinar.
El nuevo Título Experto, que se pone en marcha el próximo curso 2020/21, se denomina 'Deporte, educación y convivencia: Protección de la infancia y la adolescencia', y está concebido para la formación específica de profesionales. Una disciplina académica en la que las mujeres probablemente tengamos mucho que aportar: mucho que aprender, pero también mucho que enseñar. Me vienen a la memoria la cantidad de mujeres que durante su infancia y adolescencia no renunciaron a su afición a pesar de todas las discriminaciones sufridas. Mujeres que perseveraron por puro amor al deporte, salvando obstáculos, porque haciendo lo que más les gustaba, fuera fútbol, remo o boxeo, se sentían realizadas. Estoy convencida de que entre todas ellas hay un gran potencial, tanto para el profesorado como para el alumnado, futuras profesionales que garantizarán un aprendizaje seguro e integral.
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.