Vero Boquete guarda cuarentena voluntaria en EE UU: «Si salgo tengo que apuntar a qué hora y a quién vi»

Y es que justo cuando pisó tierra en Norteamérica fue recibida por un gran manto de nieve. «Gracias por la cálida bienvenida», bromeó en las redes sociales. Poco después, hace una semana, algo la sobresaltó de la cama. Era un terremoto de 5,7 grados en la escala de Richter, el más fuerte que se ha vivido en Utah en las últimas dos décadas, desde 1992. «Pensaba que era el fin del mundo», declaró la ex del Bayern y Paris Saint Germain.

Un tremendo susto en plena expansión del coronavirus, que ya se ha adentrado con fuerza en el continente americano, donde hasta hace quince días España se encontraba disputando el prestigioso torneo She Believes Cup. La liga allí ha cancelado los entrenamientos al menos hasta el 5 de abril. La pretemporada está parada. El curso estaba programado que arrancara el próximo 18 de abril, pero todo indica que deberán retrasar sus planes, por lo menos hasta mayo. «El fútbol es lo de menos ahora», subraya la futbolista.

Boquete, como ya hacen los deportistas en España, realiza entrenamientos diarios en casa, pautas que el técnico les envía por correo electrónico. Allí el confinamiento no es obligatorio, por el momento, pero si sale a la calle debe de registrar todos sus movimientos. «Nos han mandado unos papeles que tenemos que cubrir en el caso de que abandonemos nuestra casa. Tengo que ir apuntando qué día salgo, a qué hora, a quién vi y con quién estuve para poder hacer un seguimiento si me pongo mala«, explica.

Pese a que está permitido, ella confiesa que procura no salir. Cuarentena voluntaria. «Estos días atrás estuve entrenando con compañeras en grupos pequeños, pero ahora paso. Me siento mal viendo todo lo que pasa en España y en Italia«, afirma con gran preocupación, debido a las abultadas cifras que no cesan tanto de contagiados como de ingresados y tristemente fallecidos. Pero no todos piensan lo mismo. »En Utah la gente sigue saliendo. Algunos estados lo han cancelado todo, pero aquí hay mucha gente que sigue haciendo vida normal. Tienen que parar el país, pararlo todo«, sostiene.

La gallega lleva ya casi medio año sin competir y debido a esta complicada situación no cree que pueda disfrutar de la tensión de un partido, y todo lo que conlleva, pronto. «La liga debería empezar cuando ya no exista riesgo ninguno de contagio. Hasta ese momento deben pasar muchas cosas. Esto va para largo, así que todo lo que hablemos son suposiciones«.