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Viernes, 1 de noviembre 2019, 17:24
No es una imagen nada habitual, ni en el fútbol ni en ningún otro deporte en España. La protagoniza Ruth Ruano, delantera del Son Ferrer, equipo femenino que milita en la liga autonómica de Mallorca, que reincorporada al grupo apenas varias semanas después del nacimiento ... de su hija Julia no duda en atender las demandas de la pequeña en pleno entrenamiento para acudir al banquillo a darle el pecho. Apenas tiene dos meses de vida, por lo que en plena sesión puede reclamar su atención en varias ocasiones, aunque siempre esté al cuidado de alguien. «Cada vez que la oigo llorar paro y vengo», explica la mamá.
Una situación a la que tanto el entrenador, Jaime Turró, como el resto de sus compañeras se han acostumbrado. De hecho, es normal ver a Julia en brazos de algún miembro de la plantilla en pleno calentamiento o después de cada entrenamiento. Aunque en otras ocasiones también se queda en casa con su padre, que al igual que Ruth es futbolista. «Nos combinamos a veces. Él igual va a entrenar los martes y yo los miércoles». Lo que no ha querido es renunciar a su pasión por el fútbol, y por ello se esfuerza en que pueda ser compatible con su tarea como madre. «Si una mujer, tenga un hijo o no, quiere hacer cualquier tipo de deporte no tiene por qué haber una desigualdad en ello«.
Pero además de los entrenamientos también ha llegado a abandonar momentáneamente un partido. «Es algo totalmente natural, no sé qué es lo anormal», afirma, defendiendo la lactancia materna y el derecho a poder alimentar a tu hijo estés donde estés, deseando que la imagen que ella protagoniza se repita en muchos campos de fútbol en los próximos años.
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