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Sin levantar cabeza. La llegada de Iraia Iturregi al banquillo del primer equipo femenino rojiblanco no ha tenido el efecto esperado y deseado por un Athletic que mira cómo va perdiendo altura, situándose ya a cuatro puntos de la zona de descenso. El pasado domingo en Lezama volvió a pecar de falta de efectividad ... malgastando varias oportunidades, que lamentó aún más al borde del pitido final, cuando el Eibar logró imponerse desde el punto de penalti.
Esto no hace más que seguir alargando la peor racha de resultados de la historia del club, llegando ya hasta las diez jornadas consecutivas sin conocer la victoria. No ganan desde hace dos meses y medio, desde que el pasado 5 de noviembre, en la primera jornada entre semana de la temporada, se deshicieran del Madrid CFF (2-0). Desde entonces, y sin que Ángel Villacampa pudiera remediarlo, su caída ha sido en picado, acumulando siete encuentros sin lograr ver portería. Así es como ha cerrado los últimos cinco, frente al Sporting de Huelva, Rayo, Logroño, Real Sociedad y Eibar, con la pólvora congelada, marcando otro hito para el olvido.
Y es que nunca antes las rojiblancas habían pasado tanto tiempo sin conseguir un solo gol. En la temporada 2016-17, después de haber logrado su quinto título liguero, llegaron a acumular tres choques sin marcar, ante Granadilla, Barça y Real, pero nunca habían sobrepasado esa línea, hasta ahora. El último tanto de las leonas esta campaña fue el pasado 5 de diciembre, obra de Lucía García, sobre la bocina, para poner el empate ante el Atlético de Madrid en Lezama (3-3). Desde ahí no ha habido ningún motivo para la celebración, y eso que en casi todos los partidos disputados este curso, pese al resultado final, se han acercado con peligro en varias ocasiones a la portería rival.
Parece que la situación pesa demasiado, que en esa última asistencia o chut el balón se vuelve indomable. Una imagen muy distinta a la que tenían acostumbrados a propios y extraños. El Athletic hasta la fecha no había escatimado nunca en goles, más bien al contrario, acostumbrando a la parroquia rojiblanca a celebrar en cada temporada alguna goleada. En la pasada, le metió al Rayo 1-4 a domicilio, logrando vencer por 6-0 al Sevilla en 2018, un mes antes de meterle un 'póquer' al Sporting de Huelva (4-0).
En la temporada 2015-16 llegó a llevarse la victoria por 5-0 hasta en cinco ocasiones. Una antes fue la auténtica bestia negra del Sevilla, ganándole por 0-8 y 7-0. 10-2 llegó a vencer al Oviedo en 2010, siendo su resultado más abultado el 11-0 con el que se despachó del Pozuelo en Lezama 2008, antes de meterle uno menos (10-0) al Málaga en el mismo escenario.
Unos números más propios en estos momentos de equipos como el Barcelona, formados a base de talonario con el único objetivo de reinar en Europa, algo inalcanzable para el Athletic, superado por el elevado grado de competitividad de la actual Primera Iberdrola. Las rojiblancas son el único equipo junto al Santa Teresa, recién ascendido, que no ha logrado marcar en las últimas jornadas. Precisamente el cuadro de Badajoz, en descenso, es este sábado (12.00 horas) el próximo rival de las vizcaínas. Un duelo de necesitadas en el que las dirigidas por Iturregi, la primera entrenadora del Athletic, esperan cambiar la dinámica y ver por fin portería.
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