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El Athletic está llegando con las fuerzas justas a este final de temporada tras un año intenso de trabajo. Este martes las rojiblancas volvieron a caer ante el Barça, vigente campeón de Liga, Copa y Champions, ante el que empezaron apretando, pero frente al que no supieron mantener el ritmo. «El equipo salió bien al campo, con las ideas bastante claras. A nivel defensivo se hizo un trabajo muy serio, estando ordenadas, y generando acciones de contraataque, pero sin estar acertadas en el último pase», lamentó Iraia Iturregi, quien reconoce que les pesó mucho encajar en la primera mitad dos tantos en acciones a balón parado.
Ya en la segunda mitad, la entrenadora del conjunto vizcaíno admitió que el Barça fue mucho más superior que ellas. «No tuvimos opciones, solo una ocasión de Landaluze. Nos dedicamos a defender y no tuvimos opciones de atacar. Además, los otros dos goles que recibimos vinieron en acciones por fallos nuestros«, destacó la de Loiu, quien además afirmó que tras el descanso a las leonas les pasó factura el desgaste de haber jugado un segundo partido en apenas 48 horas. «Se nos ha ido gastando la gasolina».
Asimismo, para este encuentro, un tanto temido después de haber encajado ante el Barça el contundente 8-0 de hace apenas un mes, el Athletic contaba con siete jugadoras lesionadas, teniendo que echar mano de media docena de canteranas para completar la convocatoria. Una de ellas fue Naia Landaluze, quien disfrutó de sus primeros minutos en el primer equipo y en la máxima categoría. «Su actitud y su empeño son 'top'. Le ha llegado la oportunidad por la larga lista de bajas pero también porque ella está apretando desde abajo. Es rápida, potente y va muy bien en juego aéreo. Nos interesaba tener una jugadora así de refresco para lanzar contras o ganar disputas«, explica Iraia.
La preparadora rojiblanca no oculta que ya a estas alturas de la temporada las suyas están «saturadas a nivel físico y mental, necesitan irse de vacaciones». Antes de ello esperan este domingo en Abegondo lograr una victoria en la última jornada de la temporada. «A ver si podemos recuperar a alguna de las bajas y acabar bien el año», augurando una próxima campaña «ilusionante».
La que también reconoció que el equipo está acusando en estos últimos partidos la fatiga es Amaia Peña, quien ante el Barça disputó su tercer partido consecutivo bajo palos como titular. La guardameta de Portugalete fue providencial para que la goleada del cuadro azulgrana no fuera aún mayor. «Fue una rabia que en la primera mitad los goles a balón parado hicieran que tu trabajo fuera peor», declara, agradeciendo por segundo partido seguido la presencia de público en Lezama. «Se nota mucho su presencia en las gradas. Es una suerte ver que vuelve un poco la normalidad. Estar en el campo y tener a tu familia y a tus amigos ahí que te apoyen te dan un 'punch' especial«.
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