Iraia Iturregi sustituye al técnico del femenino, cesado por Elizegi para frenar una crisis histórica

En cuatro días dos ceses fulminantes. Si el Athletic anunció el domingo la salida de Gaizka Garitano y su sustitución por Marcelino García Toral, esta noche le llegó el turno al responsable del equipo femenino. Ángel Villacampa, entrenador que fue contratado por la actual junta, ya no dirigirá más al conjunto de la Primera Iberdrola. La histórica crisis que vive ese plantel, con nueve jornadas consecutivas sin ganar -algo que no había ocurrido nunca en la historia del club- y a apenas cuatro puntos del descenso, ha acabado con su trayectoria en Lezama. Curiosamente, la gota que ha colmado el vaso de la directiva encabezada por Aitor Elizegi ha sido la derrota en el derbi ante la Real Sociedad del pasado miércoles. Como los chicos, perdieron por un gol de diferencia y no dieron sensación alguna de poder revertir la mala racha que arrastran en la liga.

Villacampa llegó al Athletic en julio de 2019. Venía precedido por sus triunfos al frente del Atlético de Madrid, equipo con el que consiguió dos títulos de liga y una Copa de la Reina en apenas dos años y medio. Durante su campaña para presidir Ibaigane, Elizegi prometió reforzar la plantilla femenina y poner al frente a una «entrenadora de prestigio». Las negociaciones, sin embargo, no fructificaron y se optó por un técnico de nivel dentro del fútbol femenino español. El toledano ha tratado en este tiempo de profesionalizar a la plantilla y fijar unos entrenamientos y una exigencia similar a la que tiene el plantel masculino. En la primera temporada consiguió que el Athletic se clasificara para la semifinal de Copa ante el EDF Logroño. El parón por el coronavirus hizo que esa eliminatoria se disputase a la vuelta del verano y el juego ya no fue el mismo. Las rojiblancas perdieron a los penaltis ante un equipo, en teoría, de peor categoría.

El juego precisamente en esta temporada no ha sido el mejor. Las de Villacampa han ido perdiendo fuelle según avanzaban las jornadas. Además de por las lesiones, daba la sensación de que el entrenador no encontraba la tecla para reactivar a sus jugadoras. Así han firmado la racha más negativa de su historia, con 9 partidos consecutivos sin lograr el triunfo.

En su lugar, el club ha optado por un relevo natural. Esta vez ha buscado dentro de la factoría de Lezama y ha elegido a Iraia Iturregi (Bilbao, 1985), que hasta ahora dirigía al filial. Como futbolista lo ha sido todo en el Athletic. Eterna capitana, se retiró en 2017 tras quince temporadas y con 402 partidos a su espalda -es la segunda jugadora en esa estadística-. En su primer año en el equipo B logró el título del grupo norte de la liga Reto Iberdrola, la segunda categoría nacional, clausurada antes de tiempo por la Covid-19. En una entrevista con este periódico en junio reconocía que no tenía «prisa» por entrenar al primer equipo. La oportunidad le ha llegado ahora. Deja al filial lejos de la cabeza de la tabla, en séptima posición de nueve y a siete puntos del líder, el Alavés.