Ane Azkona, disponible ocho meses y medio después

Laura González

Martes, 23 de febrero 2021, 12:25 | Actualizado 15:19h.

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El Athletic femenino acaban de recibir una de las mejores noticias de la temporada. Los servicios médicos del club han firmado el alta médica de la delantera Ane Azkona, la sensación del pasado curso, quien sufrió la rotura del ligamento cruzado anterior de su rodilla derecha el pasado 10 de junio. Fue en la breve vuelta a los entrenamientos que el equipo llevó a cabo poco después de que se hiciera oficial la cancelación de la temporada por el coronavirus, y antes de que las leonas afrontaran las vacaciones de verano.

La ariete riojana, segunda máxima anotadora del Athletic la campaña anterior, y la que más asistencias de gol regaló a sus compañeras, está por tanto ya a disposición de Iraia Iturregi, ocho meses y medio después, para sumar sus primeros minutos este curso. "Espero estar pronto en el campo. Estos meses han sido duros pero también muy bonitos y he aprendido mucho. Quiero dar las gracias a todos los que han estado a mi lado", declaraba poco después de que el club informara de su total recuperación. Su estreno podría llegar este mismo sábado en la visita al feudo del Betis (17.00 horas), encuentro aplazado a finales de enero por el positivo de Ainhoa Moraza y el posterior confinamiento preventivo de media plantilla rojiblanca.

Su vuelta supone uno de los mejores refuerzos posibles para afrontar lo que queda de la segunda parte de la temporada, tras sufrir el equipo la peor racha de resultados de la historia. Después de once jornadas consecutivas sin conocer la victoria, el cuadro vizcaíno se reencontró con el triunfo en la visita del Espanyol, hace algo más de tres semanas, pero tan solo tres días después claudicó por la mínima en casa del Madrid CFF, lo que le sitúa a tres puntos del descenso.

En el seno del equipo confían en que Azkona vuelva a ser pronto la jugadora desequilibrante y peligrosa que irrumpió con fuerza en la élite, y que logró de la mano de Ángel Villacampa hacerse con un hueco definitivo en el primer equipo, siendo una de sus jugadoras más determinantes. Desde su llegada a Lezama en 2016, procedente del Ardoi, se convirtió en una de las futbolistas con más proyección de la cantera. Alternó casi desde el inicio el filial con el primer equipo, hasta que la temporada pasada se hizo con una ficha en la máxima categoría, renovando con el club, el pleno estado de alarma, hasta 2023.

Los goles siempre le han acompañado desde que recaló en la factoría rojiblanca. En su primer año logró anotar 33, en 29 partidos con el filial. En la temporada siguiente aumentó sus registros, con 37 dianas, lo que le hizo tener más presencia en el primer equipo el curso siguiente, a las órdenes de Joseba Agirre. Ya con Villacampa, que no dudó en alabarla en muchas ocasiones, se consolidó.

Ahora, tras duros meses de rehabilitación y readaptación, y después de completar con el grupo durante algunas semanas la totalidad de las tareas sin molestia alguna, la delantera pone en marcha de nuevo su cuenta particular, casi un año después de haber disputado su último choque oficial, el pasado 1 de marzo, poco antes de que la pandemia lo paralizara todo.