El Athletic firma su mejor racha de victorias desde su último título de Liga

Las siete primeras jornadas de la Liga vinieron a confirmar la fortaleza de las rojiblancas en Lezama y lo que costaría sacar a puntos a domicilio. El Athletic era décimo, aunque tenía sólo a dos puntos la octava plaza. Esa dinámica, tan influenciada por el factor campo, cambió a partir de aquel instante. Pero se mantuvo la irregularidad de un equipo que no conseguía dar un salto suficiente como para superar el ecuador de la tabla. Eso sí, rondaba en todo momento ese octavo lugar, fijado como objetivo mínimo. Por ejemplo, pasados los primeros 16 compromisos ligueros, era noveno, empatado a puntos con el octavo.

Transcurrida toda la primera vuelta, la lucha de las rojiblancas parecía estar en ese punto, en una constante pelea por situarse por encima de la mitad de la clasificación, muy alejadas tanto de los puestos europeos como del descenso. En tierra de nadie.

Lo que nadie esperaba era el impresionante despegue que ha protagonizado durante los últimos dos meses y medio. Un tiempo en el que el Athletic ha saldado todos sus partidos con victorias, enfrentándose además a varios rivales de mucha enjundia, como por ejemplo el Levante (1-2), la Real Sociedad (0-1) y el Atlético (1-0), además del Sporting Huelva (1-2), el Betis (1-0), Valencia (2-0) y el Levante Las Planas (4-1), hasta encadenar siete triunfos consecutivos. Una racha brillante que les hace ahora soñar con un billete a Champions, cuyos puestos tiene sólo a tres puntos. Su mejor cadena de resultados desde que ganó la Liga en 2016 con Joseba Aguirre en el banquillo.

La perspectiva ha cambiado por completo y el primer equipo femenino sueña con la misma fuerza que lo hace el masculino en base a colarse en la máxima competición europea. Para ello, será esencial tratar de alargar esta inercia positiva lo máximo posible. No será sencillo, ya que el sábado, a partir de las 18.00 horas, visitan al Madrid CFF, cuarto clasificado, que aventaja a las rojiblancas en dos puntos. Este duelo podría ser determinante para mantener viva la aspiración de meterse en la Champions.