El Zuazo quiere agarrarse a la élite con la energía que desprende su juventud

El mejor balonmano nacional vuelve este sábado al Polideportivo Lasesarre. Tras un año en División de Honor Oro, el Zuazo ha regresado a la élite y mañana a las 19.00 horas ante Elda Prestigio afrontará su segunda jornada de la actual temporada, después de caer estrepitosamente frente a Porriño (32-19), conjunto que disputa competición europea.

'Jaito' continúa al frente del banquillo baracaldés por séptima temporada consecutiva. El técnico, que las ha visto de todos los colores en el club, explica que «a nivel institucional era de vital importancia recuperar la categoría cuanto antes por poder captar patrocinadores que ayuden a paliar la situación económica, que todavía arrastra deuda» . Además, resalta la importancia de «no perder el sitio que Zuazo se había ganado y no caer en el olvido».

El cuadro rojinegro ha vivido una época de vaivenes económicos, que provocaron grandes impagos e incluso puso en entredicho la viabilidad de la entidad. No obstante, desde hace un año, hay una nueva propiedad que ha profesionalizado el club con trabajadores específicos en distintas áreas, que hacen más llevadero el día a día. Un cambio que desde dentro agradecen mucho. «Antes había gente muy voluntariosa, pero que tenía su trabajo y el Zuazo entonces quedaba en un segundo plano, nos faltaba hasta material deportivo para entrenar. Ahora se garantiza que la temporada acabe sin problemas económicos de impagos», remarca el entrenador.

Eso sí, el Zuazo parte con el presupuesto más bajo de la categoría. Esto les ha llevado confeccionar la plantilla más joven de la categoría, con una media de edad de sólo 20,6 años. Hasta seis de las 16 jugadoras no llegan a la veintena y la más mayor es la portera brasileña Lais Ferrera, de 25 años. Aún así, 'Jaito' se muestra «muy contento», ya que «hemos hecho el equipo que yo quería», arguye. «Es una plantilla de mucha calidad, muchas ganas de trabajar, ilusión, se les están planteando cosas y van con ello a muerte, eso es muy gratificante para un entrenador», apunta.

Evidentemente, el técnico vizcaíno es consciente de que les tocará pagar el peaje de la juventud en este inicio de temporada, donde «intentaremos crecer lo más rápido posible, confiando en que dentro de poco se verá una versión de Zuazo mucho mejor, que nos permita competir contra todos los equipos», indica. El objetivo está claro. «Hemos venido para quedarnos», destaca. Aunque también incide en la dificultad que entrañará lograr la permanencia en un año donde el último desciende de forma directa y los cuatro que le preceden se la jugarán en un play-down.

Por lo tanto, «queremos tener hambre desde el principio y no ser conformistas. Somos conscientes de que, si lo hacemos muy bien, estaremos en la parte alta del play-down o incluso salir de ahí, pero hay que tener los pies en la tierra y lo primero es evitar ese último puesto, al fin y al cabo, entrar en el play-down es un mal menor». Ahora les toca un tramo de varios partidos ante, a priori, rivales directos, que será determinante en su lucha por evitar la quema.