El Movimiento Feminista de Gernika dice que la directiva del Lointek «no puede seguir ni un día más»

Han pasado seis días desde que se diera a conocer que el que fuera entrenador durante décadas y director deportivo la última temporada está siendo investigado por un presunto delito de agresión sexual continuada a una menor hace 25 años. Desde el colectivo se considera que aquellos que tienen la obligación de prevenir y tomar medidas ante cualquier agresión sexual «han optado por mentir y defender al agresor». En este sentido destacan que tuvieron constancia de los hechos mucho antes de que la noticia se hiciera pública «y no han dado ningún paso de cara a la reparación de la persona agredida, ni de clarificar la magnitud de la agresión o el número de agredidas, ni de prevenir otras posibles agresiones».

Añaden que, tal y como han declarado oficialmente desde el club, fue Mario López el que les informó de que una mujer había interpuesto una denuncia de acoso contra él, pero que no tendría ningún recorrido. «La directiva optó por creerle y quedarse con los brazos cruzados. Queda claro que para sus miembros el acoso a niñas y mujeres no es motivo suficiente para preocuparse ni tomar medidas preventivas», han añadido.

La agrupación también ha recalcado que desde el club tampoco se tomaron medidas cuando el movimiento feminista les habló de un caso de agresiones sexuales continuadas a una menor de edad a principios de julio. «No hicieron nada para pedir asesoramiento a la federación de baloncesto u otras instituciones». Tampoco cuando algunas jugadoras pidieron que se apartara López del club porque no se sentían seguras, ni cuando una dejó la entidad por esta misma razón.

En su opinión, lo único que los responsables de la entidad han hecho ha sido «protegerle tanto en público como en privado, menospreciando el tamaño de los abusos, escondiéndose en una falsa ignorancia y manteniéndole bajo su protección». Consideran que la directiva demostró una «complicidad total» con el que era su director deportivo esta temporada hasta que la noticia se hizo publica. Y una vez que se conoció, «no han hecho más que intentar blanquear su imagen».

En su escrito también subrayan que desde la entidad deportiva se ha señalado al Movimiento Feminista de Gernika por no haber hecho una denuncia pública antes de la filtración de la información y por no haber facilitado detalles de las agresiones sexuales, acusándoles de alguna manera del malestar de la comunidad del club. «Queremos aclarar que hemos respetado desde el principio las decisiones de la mujer agredida y su proceso de reparación». Y añade: «La junta directiva del Lointek Gernika debió tomar medidas desde el momento que supo algo. El problema es que pusieron la palabra y la reputación del agresor por encima de todo».

Por último, el colectivo ha calificado de «inconcebible» la «despreocupación», a su juicio, del Ayuntamiento de la localidad desde que se conocieron los hechos. «Ha reaccionado muy tarde, con una breve nota y un simple reproche. Debe responder y tomar decisiones firmes ante estos graves sucesos. No aceptaremos menos», han concluido.